El colectivo de Enfermería se muestra contrario a los planes de Escrivá y aboga por la jubilación anticipada

Enfermeros 'obligados' a no jubilarse: "En turno de noche acabo reventado"
Francisco Reigal.


17 abr. 2021 17:00H
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POR OLALLA BATRES
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, anunció que dará hasta 12.060,12 euros en un pago único a quienes demoren su jubilación. “Estar activo es algo que la mayoría de las personas desean”, aseguró Escrivá durante su comparecencia en la Comisión del Pacto de Toledo en el Congreso. Sin embargo, demorar la jubilación más allá de lo estipulado por Ley no entra en los planes de los profesionales de Enfermería, quienes precisamente solicitan todo lo contrario. Y es que, salvo alguna excepción, precisan poder retirarse de la vida laboral de forma anticipada.

Con 62 años, Francisco Reigal tenía el objetivo de jubilarse el próximo año, pero finalmente tendrá que esperar. “El problema es que como quieren cambiar la jubilación anticipada y me penalizarían en exceso, voy a tener que estar ejerciendo hasta los 65”, explica a Redacción Médica este enfermero de Urgencias del Hospital Universitario Virgen de la Victoria.

En este sentido, al tener más de 40 años cotizados, la penalización asciende a un 7 por ciento por cada año sin cotizar. “Ahora está establecido que la penalización se realice sobre el bruto de la cuantía que se cotiza, pero están barajando un nuevo sistema para que se haga sobre el neto, por lo que te quitan mucho dinero”, lamenta.

Critica que, pese a padecer diferentes patologías “propias de la edad”, tiene que continuar realizando guardias de 14 horas y turnos interminables. “Cuando me toca turno de noche, al día siguiente no puedo ni levantarme de la cama porque, ya con mi edad, termino reventado”, reconoce. El profesional sanitario destaca que realizan una labor muy exigente y que, dada la situación epidemiológica actual, están trabajando “al 140 por ciento”.

Uno de los objetivos del Sindicato de Enfermería (Satse) es alcanzar un retiro anticipado y que se aplique coeficiente reductor de la edad de jubilación. "Son profesionales sometidos durante muchos años a situaciones continuas y reiteradas de estrés, tensión y agotamiento físico y emocional y numerosos estudios nacionales e internacionales constatan las negativas consecuencias que tienen para su salud y seguridad, así como para la atención y cuidados que se prestan a pacientes y ciudadanía en su conjunto", reivindica la organización sindial en este periódico.


Penosidad laboral


El enfermero recuerda que, hace casi dos décadas, se comenzó a hablar de ‘penosidad laboral’, pero que, sin embargo, Enfermería nunca llegó a ser considerada una profesión que entrañe ningún peligro. “A Policía y Bomberos les aplicaron un artículo de penosidad laboral, pero a nosotros no; teníamos que seguir al pie del cañón. Consideran que tenemos una vida laboral muy cómoda”, añade.

Y es que la profesión no solo requiere esfuerzo físico, sino también de atención. En este sentido, el enfermero recuerda que por sus manos pasan vidas humanas. “A diferencia de otros trabajos, yo no me puedo equivocar, por lo que tengo que estar en alerta el cien por cien del tiempo”, detalla.

Además, el enfermero critica que, mientras que los médicos tienen la opción de dejar de hacer guardias a los 55 años, a ellos no se les ha dado ninguna alternativa para mejorar su calidad de vida. “Nosotros tenemos turno rotatorio de mañana, tarde y noche, hasta que nos jubilemos. A mí no me quitan la noche por ser mayor. Ojalá nos tuvieran más en cuenta”, concluye.
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