Internistas, neurólogos, cardiólogos y médicos de Familia firman un consenso para promover esta técnica de imagen

Frente común médico para formar y acreditar en ecocardioscopia


23 ago. 2018 13:10H
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Las sociedades españolas de Medicina Interna (SEMI), Neurología (SEN), Cardiología (SEC) y Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc) han elaborado un consenso para apoyar el uso de la ecocardioscopia y promover su formación y acreditación.

En el documento, publicado en la Revista Española de Cardiología, los autores señalan su “alta rentabilidad diagnóstica” y su curva de aprendizaje relativamente corta, apreciando su uso para establecer, principalmente, un “valor predictivo negativo” con un menor número de planos que un estudio reglado.


La ecocardiocopia, extensión de la exploración física


Los representantes de las cuatros sociedades científicas ven esta herramienta como una extensión de la exploración física en la valoración diagnóstica de los pacientes con enfermedades cardiovasculares, por eso señalan que debe plasmarse de forma similar en la historia clínica y que “en ningún caso dará lugar a un informe ecocardiográfico completo”. En el caso de los hallazgos obtenidos sean “anormales”, se completará el estudio con una ecocardiografía reglada.


Las sociedades científicas ha diseñado un programa formativo con un curso on-line y una parte práctica


El consenso detalla una serie de escenarios clínicos frecuentes en los que se puede aplicar la ecocardiografía, con una serie de objetivos didácticos: medición de las cavidades cardiacas, estimación de la FEVI, detección de valvulopatías significativas, valoración de la función del ventrículo derecho y estimación de la sobrecarga de presión del ventrículo, etc.


Formación en ecocardioscopia


En el aspecto formativo, “aunque no existe un acuerdo generalizado”, se recomienda un mínimo de 50 estudios supervisados en pacientes reales con situaciones clínicas variadas para alcanzar un nivel de competencia básico.

Las sociedades científicas han diseñado un programa de formación que incluye un curso on-line en ecocardioscopia y una práctica con los citados 50 estudios supervisados como mínima. “Es muy recomendable que los facultativos, una vez concluido el periodo de formación, mantengan contacto con los laboratorios de ecocardiografía de las unidades de imagen cardiaca, que les permitirá consultar o enviar imágenes que generen dudas diagnósticas, así como decidir para qué pacientes es preciso realizar un ecocardiograma reglado”.

SEMI, SEN, SEC y Semfyc concluyen señalando la importancia de la difusión y expansión de esta técnica “ya que es una herramienta beneficiosa para los pacientes”. Sin embargo, advierten de que su uso generalizado debe asegurar una formación adecuada y acreditada de los profesionales.
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