La Revista

Juan Carlos Julián, madrileño de toda la vida, se escapa fuera cada vez que puede para desconectar de la rutina

El coordinador general de la Fundación Alcer, Juan Carlos Julián.


15 jul. 2017 20:00H
SE LEE EN 10 minutos
Aunque no es un paciente con enfermedad renal crónica, Juan Carlos Julián, coordinador general de la Fundación Renal Alcer, lleva muchos años luchando por la reinserción sociolaboral de los enfermos con esta patología. Se introdujo en el mundo asociativo casi de manera casual y, a lo largo de su trayectoria, ha perdido a algunos de sus referentes profesionales. Licenciado en Psicología y especializado en Recursos Humanos por la Universidad Complutense de Madrid, no quiso seguir con la estela familiar de banqueros. Ama el mar y la naturaleza y su familia y la música conforman parte del universo al que se traslada cada vez que queda libre de sus quehaceres diarios.

¿Por qué escogió psicología?

En principio yo había orientado mi carrera profesional a la economía. Toda mi familia son banqueros o han trabajado en la banca y yo comencé así. Cuando llegó el momento de decidir la carrera universitaria que quería estudiar descubrí que en Psicología había una rama que eran los Recursos Humanos. El análisis de las personas para ver sus capacidades de acuerdo al trabajo. Combinaba esas dos vertientes, la economista que me venía de familia con el aspecto humano de los RRHH.

¿Tienen realmente problemas para trabajar los enfermos con patologías renales?

Hemos puesto mucho énfasis en la rehabilitación o reinserción laboral de los pacientes con problemas renales crónicos. Hace no muchos años se pensaba que ya estaban fuera del mercado laboral, bastante con tener tratamiento y sobrevivir. Es muy importante que conforme los fármacos mejoran y alargan la esperanza de vida, mejore la calidad. Una forma de mejorar la calidad sin duda alguna es que sigan con la actividad laboral. Es un aspecto que nos preocupa y es determinante.

¿Qué no se atrevió a hacer en su etapa universitaria?

Sin duda, estudiar en el extranjero cuando estaba en la universidad. Creo que me aportaría, lo que me dio años después poder hacer una estancia fuera: otra visión de mi trabajo, de la vida y de otras culturas y experiencias que me gustaría haberlas tenido un poquito antes. Las circunstancias no me posibilitaron emprender esa aventura antes.

¿Tienen los psicólogos demasiada paciencia?

Mi especialidad son los Recursos Humanos y es donde siempre he ejercido, no he tratado nunca Psicología Clínica, pero el trabajo en la asociación me ha permitido hacer estudios y análisis más relacionados con el ámbito sociosanitario. Es una labor complicada, no me veo haciendo Clínica. Sin embargo, tengo compañeros que se dedican a ello y es cierto que llegado un punto en el que te puedes quemar profesionalmente. Ahí, una de las grandes ventajas que tiene la Psicología es intentar que nunca se llegue al trastorno, una situación dura y difícil de atender día a día.

¿Cuál ha sido su momento más satisfactorio profesionalmente?

Ha habido muchos. Probablemente, el mejor fue cuando desde Alcer publicamos un libro de recetas de cocina para los pacientes con enfermedad renal crónica. No es que fuese una noticia muy importante, pero es que desgraciadamente yo empecé a hacer esa publicación con un paciente que falleció. Murió muy joven. Fue muy importante para nosotros porque gracias a él empecé aquí en Alcer. Ese paciente falleció antes de ver la luz el libro. Por eso fue un momento muy satisfactorio. Él es un referente para nuestra organización. Llevamos más de 7.500 ejemplares vendidos, nos hace sentirnos orgullosos. Se publicó con una dedicación muy especial para él en el prólogo.

¿De qué trataba ese libro?

Una instantánea de Juan Carlos Julián durante la entrevista para LA REVISTA de Redacción Médica 



‘La alimentación en la enfermedad renal: recetario práctico de cocina para el enfermo renal y su familia’, es un libro que hicimos con el cocinero que entonces era una referencia en sanidad, Sergio Fernández, chef de Televisión Española en programas como ‘Saber Vivir’, ‘La mañana de La 1’, ‘Cocina con Sergio’ y que actualmente es el cocinero residente de los sábados en ‘Comer y cantar’ y tiene una sección semanal en ‘Esto me suena’, ambos de RNE. Una persona muy cercana y con la que fue muy fácil trabajar.

¿Y por qué esta temática?

Realmente, en la enfermedad renal uno de los grandes problemas es saber que puedes cocinar. Algo tan sencillo como tener un recetario como los que pueden encontrar en la calle pero adaptado a este tipo de patologías supone una ayuda tremenda para los pacientes. Está teniendo tanto éxito que estamos preparando una reedición.

¿Echa de menos el mar en Madrid? ¿Dónde suele veranear?

Me gusta mucho ir de vacaciones con la familia a Galicia. En general, me encanta todo el norte de España. San Sebastián, A Coruña… Solemos visitar dos o tres zonas concretamente pero Galicia siempre es una opción.

¿Por qué Galicia?

Mi mujer es gallega, descubrí ese paraíso hace 20 años y me encantó tanto el entorno rural como sus gentes.

¿Es amante de la naturaleza?

Sí, suelo hacer escapadas en familia. Elegimos el lugar y hacemos rutas de senderismo, no hacemos nada en especial solo gozar de lo que nos rodea.

¿Cómo suple la falta de playas en Madrid durante el verano?

Buscando opciones refrescantes y disfrutando del ocio en general, acudiendo a las piscinas que hay por toda la Comunidad.

¿Cuál es su lugar favorito de la adolescencia?

Como muchos jóvenes, el pueblo donde nació mi madre y en el que siempre veraneaba. Un lugar de Toledo cerca de Talavera de la Reina. Un sitio muy especial porque es donde tenía más libertad, podía hacer cosas que normalmente no podría realizar en Madrid… Fue muy importante para mi niñez y mi adolescencia.

¿Y para llevarse a sus ligues?

No era muy original, recurría a sitios agradables donde se podía charlar o estar tranquilos. Generalmente buscaba lugares con buena música.

¿Cuánto de importante es la música en su día a día?

Es muy importante. Todo los días escucho música. Siempre que salgo de trabajar, aprovecho cualquier momento para relajarme con ella.

EN CORTO
Libro favorito 
La saga  completa del Capitán Alatriste', de Arturo Pérez Reverte.

Película favorita 
'Cadena perpetua', de Frank Darabont.

Canción preferida 
'La casa por el tejado', de Fito y Fitipaldis.

Ciudad para vivir 
San Sebastián.

País para viajar 
Suecia.

Un objeto imprescindible
El móvil.

Un personaje de su vida
El primer jefe que tuve en el mundo asociativo.

Un personaje histórico
Barack Obama.

Un equipo de fútbol
El Real Madrid.

Un lema
Es más importante el cómo que el qué.

¿Qué le hace feliz?
 
Mi familia.
¿Y quién le inspira?

El rock español me ha gustado siempre. Rosendo, Fito y Fitipaldis, Aurora Beltrán, Tambores Zurdos… No solo la música nacional, aunque es el tipo de música que más me gusta. El rock extranjero, el hard rock o el heavy metal también me llaman la atención.

¿Es festivalero?

¡Sí, sí! Me gusta ir a conciertos, cuando puedo me escapo.

¿Cree como psicólogo que la música es una buena terapia?

Por supuesto, hay muchos estudios que lo dicen. La música ayuda a la gestión de las emociones. Todos recordamos alguna canción especial porque ha sido importante en un momento de tu vida. A mí la música me sirve como terapia para olvidarme de muchas situaciones que me han pasado en el día a día, supone ese momento de relajación. Uno de los aspectos importantes de la música es identificarte con ella. La sencillez de Leño y de Rosendo en su día y de hablar del día a día que te pasa en la calle es algo que sin duda me marcó.

¿Habrá disfrutado como un niño con la campaña que habéis hecho junto a Aurora Beltrán y David de María no?

En este caso además, Aurora Beltrán, es paciente. Ahí, la verdad es que sí que disfruté y se compenetraron muy bien pese a pertenecer a estilos muy diferentes. Pudimos juntarlos y hacer una canción que para nosotros es muy importante. Su letra da un mensaje clave como es la superación de una enfermedad y pensar que la vida sigue adelante y puedes afrontarla de una forma positiva.

¿Se hubiese atrevido a montar tu propia banda de rock?

No, seguro que no. Soy un desastre cantando y para la música no tengo oído. Yo como compositor o como músico no. Para acudir a los conciertos y escucharlos lo que quieras.

¿Quiere que sus hijos sigan su estela?

No me importaría pero creo que ellos deberían seguir sus propios intereses y gustos. A mí me gusta mucho lo que hago y considero que es algo importante, aunque cada uno debe seguir el camino que quiere.

¿Qué retos tiene en mente?

El sistema sanitario no está adaptado a las personas que atendemos a los enfermos crónicos. La sanidad vive con una concepción de otra época. Queda mucho trabajo y uno de los retos es precisamente ese, tratar de que el Sistema Naciona de Salud se adapte mejor a la atención que necesitan este tipo de personas.

Además, que los testimonios de los pacientes estén dentro de las consultas. Porque la gestión de las emociones son un aspecto fundamental, sino lo haces adecuadamente tu calidad de vida va a ser mucho peor. Eso se puede trabajar y mucho en el diagnóstico, pero no se hace. Las vivencias de los enfermos pueden ayudar. Que esto se establezca de forma reglada en las consultas es todo un objetivo.

Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.