Amenazas de muerte a una médica de guardia por seguir su juicio profesional

Las episodios de violencia a sanitarios se han convertido lamentablemente en la tónica habitual del Sistema Nacional de Salud (SNS). Insultos y golpes se repiten en pasillos de centros de salud y hospitales, con lo que se compromete el desarrollo del propio proceso asistencial. El último caso notificado ha sucedido en la provincia de Sevilla, donde una facultativa ha vivido una agresión.

Según ha confirmado el Sindicato Médico de Sevilla, la agresión se produjo en el centro de salud de Burguillos durante la madrugada del 18 de junio. Entonces, una médica del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ejercía su labor asistencial en su jornada de guardia. Un turno que se vio alterado por la llegada de un paciente y sus acompañantes.

Las personas que acudieron al centro de salud junto al paciente demandaron a la facultativa que realizará actuaciones no indicadas clínicamente, a lo que ella se negó. Esto derivó en insultos, amenaza de muerto e intimidación, ya que le advertían que estaba siendo grabada. Un caso que requirió la intervención de la Guardia Civil en la instalación sanitaria.

Necesidad de medidas efectivas

La organización sindical ha reiterado que este tipo de episodios de violencia hacia profesionales son "intolerables". "Defender la salud no puede poner en riesgo la seguridad personal de quien la ejercen", ha señalado el Sindicato Médico de Sevilla en un comunicado.

Razón por la que exigen que se activen "de inmediato" las medias legales y administrativas correspondientes, además de reforzarse los protocolos de prevención y actuación ante este tipo de situaciones. "Seguiremos denunciando cada agresión, defendiendo la dignidad de la profesión médica y exigiendo entornos seguros y respetuosos", han agregado desde la entidad.

Casos en aumento

Según datos de la Organización Médica Colegial (OMC), 847 médicos han sido víctima de algún tipo de conducta violenta desde 2010. En el caso de las enfermeras, su entidad colegial ha registrado más de 3.000 agresiones verbales o físicas solo en 2023. Cifras que coinciden con la información aportada por la Policía Nacional, que ha anotado más de 10.000 intervenciones relacionadas con episodios de este tipo contra profesionales del campo de la salud, tanto en los centros como en la atención domiciliaria.

Para evitar esta clase de incidentes, representantes de OMC y Consejo General de Enfermería (CGE) han propuesto el registro de las agresiones en el sistema de citas de Atención Primaria y Hospitalaria. De esta forma, los sanitarios contarán con una alerta cuando acudan pacientes violentos a consulta. Ninguna de las dos organizaciones aboga por incluir estos episodios en la historia clínica de la persona, algo que ya bloqueó años atrás el propio Gobierno.