Ignacio Fernández

La dirección médica del Grupo Casablanca, que gestiona residencias de mayores en la Comunidad de Madrid, ha reconocido que "han detectado algunas anomalías en la selección de personas vacunadas de Covid-19 no residentes en la residencia para mayores Casablanca Valdesur (ubicada en la localidad de Valdemoro)”, aunque lo justifica en que “sí pertenecen a su entorno”. Desde el Grupo Casablanca sostienen que “la vida útil de la vacuna una vez reconstituida es de dos horas y si no se utiliza se pierde”. Por ello, con el objetivo de “aprovechar el 100 por cien de las dosis recibidas” y “proteger al máximo” a los mayores de las residencias, “se ha vacunado a varios sacerdotes que nos asisten espiritualmente en los centros del grupo” y familiares de los empleados. Tras estos acontecimientos, se ha abierto un proceso de investigación interno y la dirección asume la responsabilidad de lo ocurrido.