El hospital, la llave para facilitar la recogida de residuos 'healthtech'

El sector de la tecnología sanitaria genera millones de residuos a lo largo del año y, por ello, conocer los últimos cambios legislativos al respecto es fundamental para el día a día de las compañías, pero también de los centros sanitarios donde acaban estos productos. Es el tema principal en torno al que ha girado la mesa organizada por la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin) dentro del XXIX Congreso Nacional de Derecho Sanitario.

"La industria de la tecnología sanitaria tiene un compromiso medioambiental y trabajar por la gestión de residuos en el proceso logístico es un punto clave", ha explicado Margarita Alfonsel, secretaria general de Fenin. "Tenemos un porcentaje elevado de productos de un solo uso, por lo que hablar de la reutilización en nuestro sector es importante", ha añadido.

Margarita Alfonsel, secretaria general de Fenin.

En este sentido, desde la federación trabajan para cumplir con las exigencias de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda de 2030 a través de estrategias internas y políticas con sus asociados, informándoles de las últimas novedades. Concretamente, se ha actualizado la directiva vigente desde hace 25 años y entre sus cambios está la responsabilidad ampliada con exigencias financieras sobre reutilización y gestión de residuos.

Ana Orondo, of counsel de Público y Regulatorio de Gómez-Acebo & Pombo, ha explicado las dos últimas normativas puesta en marcha: el Real Decreto 1055/2022 Envases y Residuos de Envases y la Ley 7/2022 Residuos y Suelos Contaminados para una economía circular. "Los residuos sanitarios tienen una problemática específica con la economía circular, porque a veces lo que se considera mejor en la práctica para otros residuos no encaja bien con los sanitarios", ha asegurado la experta.

Ana Orondo, of counsel de Público y Regulatorio de Gómez-Acebo & Pombo.

Ampliación de la responsabilidad en los residuos de tecnología sanitaria

Estas normativas obligan a las empresas a ponerse de acuerdo para adoptar medidas que impulsen un cambio hacia la sostenibilidad y la economía circular. Esto quiere decir, que los productos duren más, que se usen de forma más eficiente y que los residuos sean recuperables de alguna manera para no volver a extraer las materias de la naturaleza.

Además, la intervención de la Administración como agentes determinantes, legisladores y controladores es "muy importante". En cuanto a la ampliación de la responsabilidad, el reglamento actual obliga a que los envases que transportan tecnología sanitaria respeten el medioambiente. Por ejemplo, usando materiales menos peligrosos y advertencias en las etiquetas: "La ley anterior se centraba en la seguridad del producto, pero ahora va más allá. Se busca un modelo competitivo en el que la sostenibilidad es un elemento de valor añadido y se tiene en cuenta a la hora de tomar decisiones para dar financiación o qué productos comprar".

Gonzalo Torralbo, director comercial y de Relaciones Institucionales de Recyclia.

En esta misma línea, Gonzalo Torralbo, director comercial y Relaciones Institucionales de Recyclia, ha puesto el foco en que los aparatos eléctricos y electrónicos y las pilas y acumuladores se usan más y tienen ritmos de obsolescencia "cada vez más acelerados": "Un ciudadano genera más de 16 kilos de basura tecnológica cada año". Por ello, el primer paso es contabilizar, puesto que, según Torralbo, hay muchos hospitales que no lo notifican y ellos pueden ser claves para "facilitar y optimizar la gestión de residuos". De hecho, otro de los cambios introducidos por las regulaciones ha sido el diseño de los productos, donde hay que pensar en alargar su vida

"¿Quién es el responsable de hacer algo con el residuo sanitario? Antes era el poseedor final, pero ahora se pasa al productor del producto, ya que con su uso se convierte en residuo", ha aclarado Torralbo. No obstante, los hospitales, farmacias y laboratorios deben "avanzar y ayudar" para la recogida, como puntos de generación.

Hospital La Paz y su compromiso medioambiental

En definitiva, los hospitales no solo tienen responsabilidad en cuanto a los envases y residuos, sino también juegan un papel importante en el cuidado del medioambiente. Ángel Abad, médico adjunto a la Gerencia y Oficina Agenda 2030 del Hospital Universitario La Paz, ha especificado el compromiso de este centro sobre el tema, ya que según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el medioambiente produce un 23 por ciento de la mortalidad total del mundo, en España es un 16 por ciento.

"Cuidar el medioambiente es preservar la salud, en el hospital es nuestro propósito, pero no solo la de nuestros pacientes, sino la de todos los ciudadanos. Lo hacemos a través de los 17 ODS, que son el eje de la estrategia del centro", ha expresado Abad.

Ángel Abad, médico adjunto a la gerencia y miembro de la Oficina para el Desarrollo Sostenible y Agenda 2030 del Hospital Universitario La Paz.

De manera específica, el centro madrileño creó en 2021 la oficina para el Desarrollo Sostenible y Agenda 2030 que ha sido la encargada de hacer la estrategia de gestión pública responsable donde medir ha sido "muy importante" para ver el punto de partida. Midiendo llegaron a calcular su huella de carbono en 2021, 28.436 toneladas, en la que tienen un gran peso la electricidad, el transporte de los profesionales y los gases anestésicos.

"Tras estos resultados hemos tomados varias medidas como: hacer un nuevo plan de movilidad sostenible, intentar disminuir el consumo de agua, utilizar el material sobrante no usado en ensayos clínicos (con una cláusula en los contratos con los promotores), caminar hacia la anestesia verde y la transformación de los gases, y la formación y sensibilización en salud y cambio climático, entre otros aspectos", ha puntualizado Abad.

Mesa de debate 'Economía circular y nueva regulación de gestión de residuos: de la industria al hospital'.