Solo el 30% de los españoles quiere que la sanidad sea competencia estatal

Tres de cada diez ciudadanos españoles preferirían que la gestión de la sanidad fuese competencia de la administración central y no de las comunidades autónomas. En concreto, un 32,2 por ciento, según el Barómetro de noviembre del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas), que revela que la mitad de la población (54,4 por ciento) quiere que esta cartera siga recayendo sobre las regiones, mientras que otro 11,4 por ciento “duda”.

Los datos del CIS de noviembre sobre las variables socioeconómicas reflejan, curiosamente, que el colectivo poblacional que más se decanta por la idea de mantener la competencia sanitaria en las comunidades autónomas son los jóvenes de entre 18 y 24 años (63,1 por ciento). Esta tasa desciende hasta el 52,4 por ciento entre la población de entre 65 y 74 años y hasta el 50,2 por ciento en mayores de 75.

Por el contrario, solo un 27,9 de los jóvenes de hasta 24 años se muestra partidario de ‘devolver’ la cartera sanitaria al Estado. Esta opción, además, cuenta con más apoyos entre los hombres (36,4 por ciento) que entre las mujeres (28,3).

Preocupación por la sanidad en España

Respecto a la situación actual de la asistencia sanitaria pública, el 46,4 por ciento de la muestra reconoce que siente “mucha preocupación”, aunque este porcentaje cae hasta el 34,1 por ciento entre la población mayor de 75 años. Otro 32,1 por ciento afirma que “le preocupa bastante”, y en 11,8 por ciento esta inquietud es “regular”.

Por el contrario, un 9,1 por ciento afirma que la situación sanitaria le preocupa “poco” (5,4 por ciento) o “nada” (3,7).

La sanidad, de hecho, se encuentra en la quinta posición en la escala de mayores preocupaciones de la ciudadanía española. Solo el 3,4 por ciento la sitúan como principal inquietud, por detrás la política (12,3 por ciento), el paro (8,9), la crisis económica (7,5) y el mal comportamiento de los dirigentes políticos (6,6).

Más presupuesto para sanidad

Más consenso existe todavía entre los españoles sobre la necesidad de aumentar el presupuesto dedicado a los gastos de atención sanitaria. Así opinan casi nueve de cada diez (89,1 por ciento), mientras que un 7,5 por ciento discrepa.