María José Sánchez apostó por la parte científica a pesar de que, como médica, ganaba más dinero en dos meses

 María José Sánchez, la mejor investigadora sanitaria, habla de sus inicios como becaria sin contrato
María José Sánchez, directora del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada y de la Escuela Andaluza de Salud Pública.


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María José Sánchez (58 años, Granada) es actualmente la directora del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada y ha sido calificada por el ránking del CSIC como la mejor investigadora española en el campo sanitario dentro del Sistema Nacional de Salud. 

Tras estudiar Medicina en Granada (1984-1990) y prepararse el MIR (1993-1997), decició especializarse en Microbiología y Parasitología Clínica en el Hospital Virgen de la Nieves, también en Granada. Después llegó la residencia en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid, época en la que preparó su tesis doctoral mientras colaboraba en el área de Enfermedades Infecciosas. "Era lo que más me gustaba", afirma María José.

Un largo periodo de estudios y de formación que acabaron con una beca de investigación para trabajar en la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), donde ya podía enfocarse en el ámbito de los virus, del papiloma humano y del cáncer de cavidad oral.

"Empecé como becaria, sin contrato y con un salario muy bajo, en un proyecto de investigación mundial que coordinaba la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer", recuerda María José. Le gustó mucho el ámbito de la investigación, especialmente sobre la epidemiología del cáncer, pese a que  "fueron años difíciles" por las condiciones laborales que tenía.

Apuesta por la investigación

En ese momento supo en qué quería especializarse: "Di un giro en mi carrera profesional y me dediqué a la investigación en prevención, control y vigilancia del cáncer en España". Aunque su carrera profesional continuó desarrollándose como profesora de la EASP, como directora del Registro de Cáncer de Granada y finalmente como directora del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada (ibs.GRANADA).

Aunque a su larga experiencia hay que sumar su participación e diferentes protectos, como el Estudio Prospectivo Europeo sobre Nutrición y Cáncer (EPIC). En él participaron 521.000 personas de 23 centros en diez países europeos, siendo uno de los estudios que más producción y evidencia científica han generado. "De algún modo, esto ha ayudado a que yo esté en ese ranking", reflexiona Maria José, que tiene claro que todo es "una carrera de fondo".

Cuando colaboraba como becaria científica, renunció a la contratación: "Me llamaban para trabajar con contrato y en dos meses gana más que como becaria en todo el año". Sin embargo, María José tenía claro que se estaba dedicando a lo que realmente le gustaba, por lo que no le importaba ganar menos dinero. "Fue una apuesta personal que mi familia y mis amigos no entendían", reconoce.

Cáncer en España


Su reto siempre ha sido la investigación en Salud Pública, que "no es mucha", teniendo en cuenta los datos de un registro de cáncer por población, lo que "aporta mucho al Sistema Nacional de Salud (SNS) si se saben aprovechar los datos". Tras veinte años ligada al registro de cáncer en Granada, María José sabe de primera mano cuál es "el valor que supone contar con datos en un área como la Oncología", ya que permiten hacer estudios predictivos para conocer cuál es el riesgo que tiene la población de desarrollar cada tipo de cáncer: "Te puedo decir cuál es el riesgo que tiene la población de desarrollar cáncer porque tenemos datos desde hace 40 años y podemos conocer cómo ha ido la tendencia, cómo han ido aumentando o disminuyendo los distintos tipos de cáncer ".

Con esa información tanto de hospitales públicos o privados se puede trabajar "a diferentes niveles", analiza María José: qué desigualdades socioeconómicas hay, cómo se diagnostican y se tratan las personas con cáncer, por qué hay diferencias en la supervivencia o por qué un área geográfica tiene más datos de cáncer que otras, cánceres raros o la incidencia de cáncer en adultos y jóvenes (de 20 a 49 años) en Europa. 

Actualmente esto supone "una preocupación desde el punto de vista de Salud Pública y de las políticas públicas", señala. Ha aumentado la incidencia, ahora el cáncer es  mucho más frecuente en ese grupo de edad. "Las causas no las conocemos todavía, hay un montón de hipótesis sobre los estilos de vida, consumos de alimentos ultrapocesados o carnes rojas, exposición a a contaminantes ambientales...". Para obtener una respuesta, María José, con la EASP y el Registro de Cáncer de Trragona, está trabajando en un estudio que revele esa incidencia en España.

"Yo creo que España tiene un buen Sistema Nacional de Salud y lo que necesitamos es hacer más estudios de evaluación de resultados en salud", concluye María José.
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