El Vall d’Hebrón examina su atención oncológica para 'cumplir' con Europa

El Hospital Vall d’Hebrón de Barcelona sigue consolidándose como uno de los principales faros de conocimiento en Oncología, después de que la Organización de Institutos Europeos del Cáncer (OECI, por sus siglas en inglés) lo haya acreditado como centro integral de atención oncológica. Pese a contar con este distintivo, el hospital iniciará un plan de mejora continua para modificar todos los puntos que la OECI encontró deficitarios tras realizar una auditoría externa. Este examen tendrá lugar a finales de 2023 y uno de los requisitos que la OECI exige al hospital es añadir representantes de enfermos en cáncer dentro de la gobernanza del centro integral. La acreditación está condicionada, ya que en caso de no lograr el beneplácito por parte de la OECI a finales de año, el Vall d'Hebrón dejaría de ser un centro integral de atención oncológica.

El proceso de acreditación realizado a lo largo de los últimos dos años ha sido analizado de principio a fin por Josep Tabernero, jefe del Servicio de Oncología del centro. El especialista explica en Redacción Médica que “se han valorado los estándares de prevención, diagnóstico, seguimiento de enfermos con cáncer. Existe una tradición en algunos países europeos, que es el hecho de apostar por centros monográficos en cáncer. En España, por el contrario, se ha decidido contar con grandes hospitales generales, donde hay áreas de cáncer muy establecidas”.

Pese a que en un inicio la OECI solamente otorgaba este distintivo a centros monográficos, recientemente accedió a dar estándares de calidad a hospitales con una gran experiencia en cáncer. Ante este cambio de normativa, el Vall d’Hebrón decidió aplicar. “Se realizó una auditoría interna y el Servicio se dio cuenta de que había muchas cosas que podían ganar más estándares de calidad. Además de asegurar un tratamiento, diagnóstico y seguimiento muy volcado en la enfermedad, el aspecto educativo es fundamental, por lo que las facultades de Medicina e Enfermería deben tener asignaturas de grado y másteres en los que se toque toda el área del cáncer”, concreta Tabernero.

El paciente tendrá un papel clave en el centro integral

Tras realizar una evaluación externa de cuatro días, la auditoría presentó un documento de 90 páginas con todos los puntos que habían encontrado mejorables y que volverán a ser evaluados a finales de 2023. “La OECI quiere garantizar que el proceso de acreditación sea continuo y si se supera este eslabón, la reacreditación será a cuatro años vista. Algunos estándares cambian con el tiempo y quiere dar certeza de que los centros hacen todo lo posible para que estén actualizados”, expone el especialista, recordando que una de las premisas exigidas por la OECI es el nuevo papel que deben cobrar los pacientes con cáncer.

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"La OECI quiere garantizar que el proceso de acreditación sea continuo"

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Tabernero concederá una mayor involucración de los enfermos en la toma de decisiones dentro del campus Vall d’Hebrón, tal y como la OECI exige: “Dentro de la gobernanza de toda la institución deberá haber un representante de los enfermos con cáncer. Hasta la fecha en el Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO) se incorporó un representante por parte de los enfermos, siendo el primer centro de toda Catalunya que lo realiza”. Pese a esta iniciativa pionera, el oncólogo está seguro de que a finales de 2023 la presencia de este colectivo en la gobernanza del centro integral estará más que asegurada.

Haber conseguido esta acreditación europea también abre un gran abanico de posibilidades al Vall d’Hebrón en términos de investigación, tal y como recuerda Tabernero: “La Comisión Europea prioriza a los centros que tengan esta acreditación para financiar diferentes proyectos de investigación en cáncer. Esto no quiere decir que se consiga la exclusividad, pero sí una gran ventaja en poder participar de todas estas convocatorias. El hospital contaba con grandes sinergias entre hospitales europeos, pero ahora se intensificarán más debido a las convocatorias de nuevos proyectos de investigación”.

El futuro de la inteligencia artificial en cáncer

 
El papel de la inteligencia artificial a la hora de abordar cualquier tipo de tumor es visto por Tabernero como “una herramienta que permitirá aumentar la rigurosidad en todos los informes. Esta tecnología no sustituirá el papel de los profesionales, lo que hará es que cuando haya un diagnóstico en enfermedades poco frecuentes, se podrá validar no solamente por la experiencia del profesional, sino que también por la experiencia de datos profesionales”.

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"Se podrán validar diagnósticos por la experiencia del profesioanl y por la experiencia de datos profesionales"

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Otra función que el oncólogo espera que la inteligencia artificial realice en un futuro es tener datos reales de los enfermos que hay en la calle, para asegurar que “lo que se está juzgando en los hospitales será aplicable a la población y en situaciones poco frecuentes. Se debe conseguir tener la seguridad de que las decisiones que se toman en un enfermo no solamente están basadas en un mejor conocimiento, sino en la máxima información disponible de enfermedades que son tratadas en otras partes del mundo”.