La metodología tiene como objetivo garantizar la fiabilidad de instalaciones y equipos



16 oct. 2013 12:14H
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Dña. Laura Añón Gómez,Ingeniero Industrial por la UAX

Dr. José Antonio Rescalvo Santiago, Profesor UAX, Director ARGOS ITM S.A.

D. Enrique Díaz-Plaza Sanz, Profesor UAX, Director de desarrollo de negocio para el sector energético IBM España

Dra. Verónica Salazar Nussio, Profesora UAX, Jefa del servicio de anestesia del HCV de la UAX

El sector sanitario es sin duda uno de los más complejos en cuanto a su gestión por el difícil equilibrio entre costes y prestación de servicios que deben ser considerados, pero si en algo estamos de acuerdo usuarios, gestores y personal sanitario es en la necesidad de garantizar la excelencia en los centros hospitalarios administrando los recursos disponibles del mejor modo posible en un entorno que cada día se muestra más dependiente de la tecnología.

Destacan por su singularidad en un centro hospitalario las instalaciones y equipos, con costes asociados de adquisición y mantenimiento elevados y de los que sin embargo no podemos prescindir sin repercusiones negativas para los usuarios, que serán de pérdida de calidad del servicio en el mejor de los casos. El mantenimiento de los denominados productos sanitarios, especialmente los equipos electromédicos, cobra por tanto gran relevancia e impulsa a todos los implicados a la búsqueda de las mejores soluciones que garanticen que dichos equipos mantienen las funciones previstas durante su vida útil sin rebajar en ningún caso la calidad y la seguridad exigidas, es decir, a perseguir su fiabilidad.

Equipo anestésico Fabius Tiro de Dräger Medical en el HCV de la Universidad Alfonso X El Sabio.

La metodología ReliabilityCenteredMaintenance (RCM), desarrollada en el sector aeronáutico y que cuenta desde el año 2009 con la normativa de aplicación UNE-EN 60300-3-11, surge como respuesta a las demandas de fiabilidad de múltiples industrias, entre las que se encuentra el sector de ingeniería médica y sanitaria. Su aplicación a equipos e instalaciones presentes en un centro hospitalarionecesita de la colaboración de fabricante y mantenedor para optimizar en términos técnicos y económicos el mantenimiento efectuado, exigiendo por parte de ambos elevados conocimientos de los activos mantenibles ylas metodologías de análisis de modos de fallos y efectos así como de un know-howespecífico de la metodologíaque hace que aporte gran cantidad de beneficios cuando es implementada por una empresa con un alto perfil tecnológico que debe ser el propio fabricante o una empresa mantenedora acreditada por parte del mismo en lo relativo a los protocolos, la formación y el uso de las herramientas adecuadas.

Como parte del estudio(*) que se pretende resumir en este artículo se ha implementado la metodología RCM a los equipos de anestesia Fabius Tiro del fabricante Dräger Medicalutilizados en el Hospital Clínico Veterinario de la Universidad Alfonso X El Sabio consiguiéndose obtener un plan de mantenimiento relativo a estos equipos que garantiza las funciones definidas por el fabricante y demandadas por el personal sanitario teniendo en cuenta criterios de seguridad, medioambientales, operacionales y económicosy llegándose por tanto a mantener los equipos con la deseada fiabilidad sin obviar el uso racional de los recursos, entendidos estos últimos como personal de mantenimiento, medios técnicos e información.

Los tres pilares de la fiabilidad: mantenimiento, capacitación y gestión

Del estudio realizado se concluye que definir tareas de mantenimiento adecuadas no es suficientesino que es imprescindible abordar también la gestión del mantenimiento propuesto y la capacitación por parte de mantenedores y usuarios, que partirá del fabricante de los activos, variables estas que no son tenidas en cuenta normalmente en los análisis de fiabilidad.

La capacitación pasa en todo caso por un proceso de información y formación relativo a los equipos presentes en el centro hospitalario que debe exigirse al mantenedor de cada uno de los sistemas como única forma de asegurar que el mantenimiento llevado a cabo se realiza con garantías; cuestión fundamental cuando, como en este caso, nos referimos a equipos críticos en cuanto a la seguridad de sus usuarios tanto del personal médico como de los pacientes.Por otra parte la capacitación no puede restringirse al personal de mantenimiento debiendo hacerse extensible al personal sanitario que como usuario juega un papel clave en cuanto a la protección de la fiabilidad determinada por el fabricante y conservada mediante las adecuadas prácticas por parte del mantenedor y usuario.

El mantenimiento para ser eficiente debe ser dinámico, necesitando de una constante retroalimentación que adecúe las tareas realizadas al estado en que se encuentran los equipos mantenibles, a tecnologías, técnicas y materiales novedosos que surgen en el mercado así como a las exigencias y recomendaciones normativas para el sector.Para mantener esta perspectiva de mejora continua resulta de gran utilidad la implementación de técnicas y herramientas de gestión avanzadas que nos permitan conocer el estado de los sistemas presentes en el centro hospitalario, como es el caso de sistemas de gestión de activos e indicadores de gestión.

(*) Proyecto fin de carrera “Mantenimiento Integral de Hospital Veterinario Universitario Basado en Fiabilidad” de la Universidad Alfonso X El Sabio calificado con Matrícula de Honor.

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