Recuerda que el ministerio ha excluido de la prestación más de 400 medicamentos de uso común



15 mar. 2015 14:38H
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Redacción. Oviedo
El 1 de julio de 2012 entraba en vigor el copago de los productos farmacéuticos establecido en el Real Decreto Ley 16/2012 de Medidas Urgentes para Garantizar la Sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud. Una medida que ha supuesto para los residentes en Asturias un gasto de 36,6 millones de euros hasta el 31 de diciembre del pasado año, según ha señalado la Consejería de Sanidad este domingo.
 

El consejero de Sanidad del Principado de Asturias, Faustino Blanco.

Del total de la cifra acumulada, 5,6 millones se corresponden con los cobros realizados entre julio y diciembre de 2012, mientras que en 2013 y 2014 los usuarios abonaron por sus medicamentos con receta 15,3 y 15,5 millones, respectivamente, una vez descontado el importe que la Administración autonómica ha devuelto a aquellos usuarios que excedieron su límite de aportación.
 
Hasta entonces, los asturianos en activo abonaban en la farmacia el 40 por ciento del importe de sus medicamentos, mientras que los pensionistas estaban exentos del pago. En la actualidad, los ciudadanos están enmarcados en los tramos diseñados por el ministerio, de modo que ahora los  pensionistas, en función de su renta, no pagan nada o abonan entre el 10 y el 60 por ciento, con unos topes de aportación. Por su parte, los trabajadores activos se enmarcan también en tres grupos y abonan en la farmacia el  40, el 50  o el 60 por ciento, según su renta.
 
El departamento subraya que en Asturias el copago se puso en marcha “por imperativo” del Gobierno, manteniendo el circuito habitual de consulta médica o de enfermería y de retirada de los medicamentos prescritos en las oficinas de farmacia. Además, señala que desde el 1 de agosto de 2012 quedaron excluidas de la prestación farmacéutica en el Sistema Nacional de Salud 426 medicamentos de uso común como la codeína, las lágrimas artificiales o la acetilcisteína, indicados para el tratamiento de enfermedades tan comunes como los catarros, los herpes o la diarrea, lo que, a juicio de la Consejería, "supone un perjuicio para las rentas medias y bajas".
 
Por otra parte, anotan la identificación de 63.900 personas que no han abonado el importe correspondiente por la retirada de fármacos una vez alcanzado su techo máximo de copago mensual, derivado de la puesta en marcha del código del historial clínico electrónico presente en las recetas.
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