En la recogida de rúbricas también ha participado la Asociación Unión y Fuerza



16 oct. 2015 18:40H
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Redacción. Madrid
La Confederación Nacional de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica, entidad miembro de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe), y la Asociación Unión y Fuerza, han entregado este viernes en el Congreso de los Diputados más de 500.000 firmas de apoyo a una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para la puesta en marcha de una ley para su protección sociolaboral, económica y sanitaria.

Representantes de Cocemfe y de la Asociación
Unión y Fuerza.

Al haber recabado las 500.000 firmas, la ILP pasará a tramitarse en el Congreso y no decaerá ante la inminente disolución de las Cámaras por las elecciones generales de diciembre. Se debatirá, previsiblemente, la próxima legislatura.

También han registrado el centenar de mociones aprobadas en numerosos ayuntamientos y diputaciones provinciales de España y que han sido respaldadas por todos los grupos parlamentarios con representación en el Congreso.

El objetivo de la ILP es conseguir esta protección para los pacientes de fibromialgia y síndrome de fatiga crónica-encefalomielitis miálgica, y a nivel nacional. Ambas asociaciones calculan que un 3 por cientoo de la población española está afectada

Enfermedad sin cura

Son dos enfermedades crónicas diferentes pero con síntomas similares, de diagnóstico clínico. Su causa es desconocida y sin cura. Además, tienen efectos invalidantes para el trabajo y las tareas cotidianas. Los tratamientos actuales se limitan, "con escaso éxito", a aliviar los síntomas de ambas patologías, señala la exposición de motivos de la iniciativa.

En concreto, en ella se insta a la creación de una legislación específica que dé visibilidad a la enfermedad, al fomento de la investigación en las universidades y la formación médica, así como a que se establezcan equipos especializados multidisciplinares para la atención de los pacientes.

También, la ILP destaca la necesidad de adaptar los puestos de trabajo, reconocer la fibromialgia como enfermedad discapacitante y agilizar los dispositivos asistenciales para la atención al colectivo.

Abordar el abandono

La Asociación FM Unión y Fuerza ha sido la promotora de la iniciativa. Su presidenta, Yolanda Gutiérrez, ha contado a los medios  que con 35 años toma 19 pastillas al día. Tiene dos niños y es autónoma. Trabaja de cara al público. "Cuando fui diagnosticada no me dieron información y me dijeron que me acostumbrara a vivir así porque no había solución", ha señalado.

Según ha revelado, esta enfermedad conlleva que muchos pacientes sean operados en numerosas ocasiones, y tengan que trabajar con la misma exigencia y en igualdad de condiciones que otras personas que no están medicadas. "Es hora de que haya una investigación seria. Una partida presupuestaria para que investiguen", ha reclamado.

Al mismo tiempo, la presidenta de la Confederación Nacional de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica, Rosario Rodríguez, ha solicitado que estas enfermedades sean incluidas en el Plan Integral de la Cronicidad, que estas patologías se estudien en las carreras universitarias de Ciencias de la Salud, que los profesionales sanitarios estén formados de forma continua, además de que las personas que no pueden trabajar por esta enfermedad no tengan que llegar a los tribunales médicos.

"Hay personas que sufren mucho al tener que trabajar. Por eso hacemos un llamamiento a los políticos para que se dediquen a los ciudadanos. Esto lo podían haber hecho ellos sin tener que contar con las firmas, que están recogidas entre los enfermos a pie de calle. (...) Están condenando a muchas personas a trabajar con mucho dolor. Se nos condena a trabajar con niveles de medicación muy altos con los que no se debería ni conducir. ¿Si es una enfermedad crónica e incurable porque no se nos da un tratamiento de enfermos crónicos?", ha reivindicado en declaraciones a los medios frente al Congreso.

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