Cumple con las pólizas de aseguramiento dictadas por el RD 16/2012 ofreciendo una tarjeta sanitaria para obtener atención por entre 60 y 157 euros en función de la edad



8 mar. 2015 14:30H
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Redacción. Barcelona  
El Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) ha dado cumplimiento al decreto estatal que regula el acceso de los inmigrantes a la sanidad pública y ha implantado una tarjeta sanitaria de pago con cuotas mensuales para extranjeros con recursos.

El gerente de Atención Ciudadana del CatSalut, Joan Lluís Piqué.

En una instrucción del CatSalut que entró en vigor el 1 de marzo y a la que ha tenido acceso Europa Press, se concreta que los extranjeros podrán tener una tarjeta sanitaria si pagan 60 euros al mes si tienen menos de 65 años, y 157 euros si superan esa edad.

Este sistema de "convenios especiales" para obtener una tarjeta sanitaria se basa en la lógica de los seguros privados, a los que sólo pueden acceder las personas que cumplan unos requisitos mínimos y puedan costear las cuotas.

El gerente de Atención Ciudadana del CatSalut, Joan Lluís Piqué, ha explicado a Europa Press que la instrucción "es simplemente la translación a Catalunya del decreto del Estado, que estipula primas para extranjeros con recursos que no están asegurados".

Las personas que podrán obtener la tarjeta sanitaria de pago son: españoles que no trabajan, pero tienen ingresos superiores a 100.000 euros al año --rentistas--; europeos que quieran ser atendidos por el sistema sanitario público español, y nacionales de otros países que durante su estancia en España quieran tener tarjeta sanitaria.

Deberán cumplir el requisito de no estar asegurados ni ser beneficiarios del Sistema Nacional de Salud, acreditar la residencia efectiva en España durante un año y estar empadronados en algún municipio catalán: "Con estos requisitos se trata de evitar el llamado turismo sanitario", ha dicho Piqué.

La tarjeta sanitaria de pago reconoce el derecho de los extranjeros a la atención urgente, primaria, especializada, psiquiátrica y salud mental, sociosanitaria y rehabilitación, así como al transporte sanitario urgente.

Piqué ha puesto el ejemplo de un rentista ruso que decide venir a vivir a Catalunya: "Cuando lleve un año residiendo aquí y siempre que no cotice a la seguridad social, podrá obtener una tarjeta sanitaria si abona la prima mensual".

Respuesta en 30 días

En un plazo máximo de 30 días desde la solicitud de la tarjeta, el gerente de la región sanitaria correspondiente notificará a la persona interesada "la aprobación o denegación de la correspondiente resolución", recoge la instrucción.

En caso de que se apruebe la solicitud, se procederá a la firma del convenio especial, "después del pago de la primera cuota correspondiente al mes en curso en la fecha de la firma".

En caso de que los titulares dejen de cumplir de forma sobrevenida estas condiciones, el CatSalut reclamará el importe correspondiente a la atención recibida "desde el momento del incumplimiento, como si se tratara de un usuario privado".

Extranjeros sin recursos

Piqué ha destacado que con la implantación de la tarjeta sanitaria de pago para extranjeros con recursos "se cierra el círculo, ya que el CatSalut también ha hecho una instrucción para garantizar atención a los inmigrantes vulnerables".

De este modo, "todos los ciudadanos extranjeros estarán cubiertos" por el CatSalut, y ninguna persona quedará excluida de la sanidad pública, sea cual sea su poder adquisitivo.

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