Ana Alonso, jefa de la Sección de Braquiterapia y Técnicas Especiales; y Estrella Turienzo, responsable de la Sección de Tubo Digestivo.
Los servicios de Cirugía General y Oncología Radioterápica del
Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) han realizado, por primera vez en Asturias, una
intervención quirúrgica con radioterapia intraoperatoria en un caso de cirugía oncológica en la cavidad abdominal. Esta técnica se aplicó en una actuación multidisciplinar que también implicó a los servicios de Anestesia, Radiofísica Hospitalaria y Enfermería Quirúrgica.
La cirujana
Estrella Turienzo, responsable de la Sección de Tubo Digestivo, y la oncóloga radioterápica
Ana Alonso, jefa de la Sección de Braquiterapia y Técnicas Especiales, llevaron a cabo la intervención con éxito en la última semana de agosto. El paciente, un varón de 74 años, presentaba un
sarcoma retroperitoneal de grandes dimensiones, cuyo abordaje quirúrgico y radioterápico suponía un importante desafío clínico.
En una operación que se prolongó por más de diez horas, se logró
extirpar una masa tumoral de unos 30 centímetros de diámetro, que ocupaba gran parte de la cavidad abdominal. Tras la cirugía, el paciente evoluciona favorablemente.
La radioterapia intraoperatoria
La radioterapia intraoperatoria se aplicó directamente en la zona de mayor adherencia del tumor, con el objetivo de reducir el riesgo de recaída. Esta técnica permite administrar
una única dosis de radiación en el quirófano, justo después de la extirpación del tumor, lo que minimiza la exposición de los tejidos sanos y mejora la precisión del tratamiento.
El éxito de la intervención fue posible gracias al trabajo coordinado de los equipos de
Anestesia, Enfermería Quirúrgica y
Radiofísica Hospitalaria, representado en el quirófano por
Alfonso Villacé.
A diferencia de la radioterapia convencional, que requiere entre 25 y 30 sesiones diarias tras la cirugía, la intraoperatoria permite combinar en un solo procedimiento el tratamiento quirúrgico y radioterápico, lo que supone un beneficio significativo para el paciente.
La radioterapia intraoperatoria consiste en aplicar
una dosis alta de radiación en una zona localizada, justo después de la extirpación del tumor, sin salir del quirófano. De este modo, se visualiza con precisión el área a tratar, lo que facilita la eliminación de células tumorales sin dañar órganos ni tejidos sanos.
Entre sus ventajas destacan la disminución de los efectos secundarios de la radiación, la reducción de los riesgos de toxicidad, una recuperación más rápida y
una mejora en la calidad de vida del paciente. En algunos casos, incluso evita la necesidad de más sesiones de radiación externa.
Tratamientos complementarios
Este método puede utilizarse como tratamiento complementario a la radioterapia externa o como refuerzo en
tumores con alto riesgo de recurrencia local, como los de
mama, recto, páncreas, estómago, sarcomas y cavidad oral. Se trata de una técnica avanzada y precisa, que forma parte de estrategias multidisciplinarias para mejorar el control local en diversos tipos de cáncer.
Esta terapia está indicada para determinados casos oncológicos que evalúa de manera pormenorizada un comité multidisciplinar de especialistas. Desde 2020, el HUCA ha empleado la radioterapia intraoperatoria en
tumores ginecológicos, traumatológicos de partes blandas y metástasis cerebrales. Esta intervención marca la primera aplicación de la técnica en un sarcoma abdominal de gran tamaño, lo que consolida el compromiso del hospital con la innovación y la excelencia asistencial, al tiempo que lo sitúa a la vanguardia del tratamiento oncológico de alta precisión.
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