La tensión laboral británica repatría a los sanitarios 'huidos' del SNS

Las últimas políticas de corte conservador del primer ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, han generado que la situación para los sanitarios extranjeros en el país esté cada vez más tensionada. Desde el Brexit, que supuso un punto de inflexión para los profesionales de otros países que trabajan en el NHS (Sistema de Salud de Reino Unido), el contexto es cada vez más complejo.

Joan Pons, enfermero español que trabaja en el NHS, explica a Redacción Médica que, desde la aprobación del Brexit, cada vez hay menos enfermeros que lleguen de otros países de Europa en el sistema de salud británico. Además, asegura que muchos de sus compañeros españoles se han vuelto a España, o han ido a trabajar a otros países como Irlanda o Alemania.

Asimismo, el enfermero apela a que la situación propia del NHS puede 'repeler' a algunos sanitarios, pues el aumento de la carga de trabajo, las abultadas listas de espera y la falta de sanitarios están a la orden del día. "No solo pasa con las enfermeras extranjeras, por ejemplo, en general las profesionales de primera línea se están quemando", asegura el enfermero. Esto, lo que hace es que muchas personas dejen la profesión o pidan la jubilación anticipada, lo que agrava el problema. "Esto además afecta a los recién licenciados, que no tiene compañeros con más experiencia que puedan trasmitirles ese conocimiento", indica Pons que explica que hay personas que, "recién licenciadas de la Universidad", deciden no trabajar en el sistema sanitario británico.

"El peor sueldo enfermero de Europa"

Otro de los grandes problemas que desembocan en esa huida de sanitarios es el recorte de los sueldos. "Nos han congelado los salarios en los últimos 13 años y hemos perdido un valor adquisitivo del 20 por ciento", pone de ejemplo Joan Pons hablando de las enfermeras. El profesional apunta hacia que, cuando él llegó a Reino Unido "eran el mejor sueldo de Europa" y que ahora que "son el peor" es un factor que afecta "a la hora de atraer enfermeros del resto de Europa".

En general, Pons explica que desde el Brexit "el número de sanitarios españoles que llegan al Reino Unido es prácticamente nulo". Un cambio de tendencia al que apunta es la contratación de sanitarios extranjeros ahora proviene de Asia y África; cada vez Reino Unido es un destino laboral menos atractivo para los sanitarios europeos. Aun así, comenta que, hay tanta falta de personal en el NHS que los sanitarios extranjeros "no tienen miedo a perder su trabajo".

El Brexit reventó al sanitario extranjero

En un término más personal, el enfermero explica que, aunque la situación actual es tensa, la única vez que se ha planteado volver a trabajar en España fue con la aprobación del Brexit, "el mayor disparate que ha legislado cualquier gobierno". "Si hubiera estado en los primeros 10 años de mi carrera, me habría vuelto sin dudarlo, pero llegó en un momento en el que yo tenía aquí asentada una carrera, que además ha sido muy bonita", relata. Pese a ello, no descarta al cien por cien no volver a su país a trabajar, "si surgiera el puesto adecuado".

Aunque con la situación tensa y la baja de salarios, Pons recuerda que Reino Unido puede seguir siendo un destino que tiene muchas ventajas para los sanitarios, como por ejemplo que, al haber plazas libres, se puede elegir con holgura especialidad, así como cambiar de un trabajo a otro "enseguida". Pero aun así, desde el propio sistema de salud británico son conscientes del problema y, asegura Pons, trabajan por hacer más atractivo el NHS tanto para sanitarios británicos como extranjeros.