Covid: falta de olfato y gusto un año después del contagio en casos leves

La pérdida del olfato y del gusto, o la anosmia, es uno de los síntomas más comunes en caso de padecer el Covid-19. Ahora, un nuevo trabajo demuestra que también es uno de los más persistentes, tras comprobar que "una proporción sustancial de pacientes sintomáticos leve o moderados caracterizado por un nuevo inicio de disfunción quimiosensorial todavía se quejaba de la alteración del sentido del olfato o del gusto un año después del inicio". 

Con el estudio, investigadores italianos quisieron estimar la prevalencia de un año y la tasa de recuperación de la disfunción quimiosensorial autoinformada en una serie de sujetos con Covid-19 sintomático leve a moderado previo. Para ello utilizaron el cuestionario Sino-Nasal Outcome Test 22 (SNOT-22), que ha sido calificado como el mejor indicador específico de calidad de vida para la patología nasosinusal.

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En total, 268 de los 315 pacientes (85,1 por ciento) que completaron la encuesta al inicio del estudio también completaron la entrevista de seguimiento. La prevalencia de 12 meses de disfunción quimiosensorial asociada a Covid-19 autoinformada fue del 21,3 por ciento.

De los 187 pacientes que se quejaron de disfunción quimiosensorial asociada a Covid-19 al inicio del estudio, 130 (69,5 por ciento) informaron una resolución completa de la alteración del gusto o del olfato, 41 (21,9 por ciento) informaron una disminución en la gravedad, y 16 (8,6 por ciento) informaron de que el síntoma no había cambiado o había empeorado un año después del inicio. 

El trabajo, que es una preimpresión y todavía no ha sido revisado por pares, también muestra que el riesgo de persistencia fue mayor para los pacientes que informaron una puntuación SNOT-22 inicial mayor o igual a cuatro, así como para aquellos que requirieron al menos 22 días para obtener una PCR negativa.