La Jornada de Alta Dirección en Inmuno-Oncología ha abordado los nuevos desafíos que esperan a la gestión oncológica

La Medicina de precisión, clave para planificar organizaciones sanitarias
Varios de los ponentes asistentes a la jornada.


12 feb. 2019 17:40H
SE LEE EN 3 minutos
La Jornada, organizada por el centro de Investigación en innovación Sanitaria de la escuela de negocios IESE (CRHIM por sus siglas en inglés), la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), la Fundación SEDISA, y la compañía biofarmacéutica Bristol-Myers Squibb, ha reunido a expertos de diferentes disciplinas: gestores hospitalarios y de servicios de salud, médicos especialistas en oncología y farmacéuticos de hospital.


"Necesitamos de nuevos perfiles profesionales sanitarios"


Todos ellos han coincidido en afirmar que la Inmuno-Oncología ha supuesto un cambio de paradigma en el tratamiento del cáncer, con importantes implicaciones y retos en todos los ámbitos: pacientes, profesionales sanitarios, centros asistenciales y Administración Sanitaria, tanto a nivel nacional como en las CC.AA. Estos nuevos retos tienen una alta repercusión en la gestión de la oncología, que presenta una alta heterogeneidad entre comunidades y hospitales, llegando incluso a producir inequidades.

"Desde hace varias décadas, el sistema inmune ha sido objeto de investigación por su influencia en el desarrollo de los tumores. Fruto de esta investigación, en el campo de la Oncología se ha producido un avance sin precedentes en el desarrollo de moléculas que controlan el sistema inmune y se han ido sucediendo nuevas incorporaciones de moléculas y nuevas indicaciones de fármacos con resultados muy positivos", subrayan los expertos asistentes a la jornada. 

Medicina de precisión 


"La medicina de precisión está revolucionando tanto la investigación como la asistencia sanitaria en todos los campos, haciendo necesaria una transformación de las organizaciones sanitarias del Sistema Nacional de Salud (SNS)", han señalado en la jornada. Es por eso que la articulación de este modelo de Medicina Personalizada debe cimentarse en torno a diferentes pilares.

Por una parte, tiene que regularse. "Nuestro sistema de salud público compete a administraciones que necesitan de un marco regulatorio directo más allá del que podría definirse si se tratara de instituciones privadas. Lógicamente ello afecta a la provisión (con sus tres componentes: asistencia, docencia e investigación) y la evaluación", afirman.

"Por las características de nuestro país incluye ámbitos competenciales diferentes: ministerio, comunidades autónomas y en ocasiones administraciones locales. Además de incorporar la medicina de precisión hay que asegurar la equidad en su acceso", aseguran. Para ello, prosiguen, "resulta crítico crear redes basadas en Centros de Referencia".

De este modo, "se precisa la implantación de sistemas informáticos que permitan manejar y compartir los datos generados y debe garantizarse que las técnicas empleadas sean precisas y fiables. Necesitamos de nuevos perfiles profesionales".

"Seguimos siendo esclavos de estructuras pétreas"


Para César Pascual, Coordinador de Proyectos de la Fundación SEDISA, “debemos superar el actual modelo organizativo. La medicina de precisión supone un impacto en biotecnología que va a aportar soluciones en el tratamiento oncológico y conlleva una necesidad de innovación organizativa para que resulte eficiente.

Pero seguimos siendo esclavos de estructuras pétreas, férreas, monolíticas. Para adecuarse a un entorno cambiante, y cada vez menos previsible, no valen las organizaciones sanitarias tal y como las conocemos, organizaciones sanitarias que, especialmente las públicas, han vivido durante muchos años ignorando la evolución del entorno”.

Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.