Responsabilizan a la caída de los precios y la falta de ayudas públicas



3 mar. 2014 21:52H
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Imagen del día de la fundación de Alentia Biotech, con Jesús Acebillo, Leire Pajín, Antonio Griñán, Juan López-Belmonte y Jordi Ramentol.

Redacción. Madrid
Finalmente, tras cinco años de anuncios y fotos, pero también de continuos retrasos injustificados, los laboratorios españoles Rovi y Ferrer han cancelado su proyecto para construir en Granada la primera planta de producción de vacunas contra la gripe de España.

La compañía que dirige Juan López-Belmonte ha informado de esta cuestión a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en su informe anual de resultados. En el mismo, indica que tanto esta compañía como el Grupo Ferrer, que dirige Jordi Ramentol, “han decidido cancelar el proyecto de su joint-venture Alentia Biotech", una iniciativa "consistente en la construcción de un centro nacional para la producción de vacunas antigripales” en la que daba apoyo tecnológico el área de vacunas de Novartis.

En el texto, se informa de que “esta decisión se ha tomado principalmente debido a una importante reducción de los precios del mercado de vacunas antigripales en las tres últimas campañas, y la imposibilidad de obtener las ayudas públicas necesarias como consecuencia de la adversa situación financiera que atraviesa el país”. Añade que el proyecto requería una “inversión estimada de aproximadamente 92 millones de euros”.

Sin novedades desde 2011

El proyecto comienza en 2009, cuando se firmó el primer protocolo para llevar a cabo la construcción de la planta de vacunas. Más tarde, en septiembre de 2011, se fundó Alentia Biotech, en un acto en el que participaron tanto Leire Pajín como Antonio Griñán, por entonces ministra de Sanidad y presidente de la Junta de Andalucía, respectivamente. Por entonces, la idea era que las instalaciones contaran con una capacidad anual de fabricación de 10 millones de dosis de vacunas contra la gripe estacional y de 30 millones de dosis de vacunas contra la gripe pandémica.

Pero tres años más tarde, nada había cambiado. Alentia no contaba siquiera con página web corporativa o un teléfono de contacto.

Finalmente, el proyecto ha acabado en un fracaso que daña gravemente al prestigio de la industria farmacéutica española y a una sociedad, la andaluza, que ya no se podrá beneficiar de los puestos de trabajo que se iban a crear. 


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Vea el documento enviado por Rovi a la CNMV.

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