Los pacientes trasplantados muestran su “confianza” en el modelo de la ONT

Redacción. Madrid
Que España sea líder mundial en donación y trasplante de órganos no es solo una estadística sobre la que poder presumir. Detrás de ella están muchas vidas salvadas y otras tantas mejoradas gracias a un acto de solidaridad que, afortunadamente, ha calado hondo y cada vez es más frecuente en nuestro país. Tras los últimos datos ofrecidos por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), que refleja un nuevo récord de actividad en 2014, quienes se benefician de ellos han mostrado su agradecimiento a todos los que contribuyen a hacer posible esta segunda oportunidad.

Jesús Molinuevo preside la Federación Nacional de Alcer.

Los datos – 4.360 trasplantados y 36 donantes por millón de personas - no dejan lugar a la duda sobre el carácter histórico de este logro, nunca antes alcanzado en todo el mundo. Ante esta realidad, las asociaciones de pacientes no han dudado en agradecer el trabajo realizado, mucho y muy bueno, a través de un comunicado firmado por la Federación Nacional de Asociaciones Alcer, la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (Fneth), la Federación Española de Trasplantados de Corazón (Fetco) y la Federación Española de Fibrosis Quística.

En el texto, expresan un especial agradecimiento a las familias “por su solidaridad”. “Las bajas tasas de negativas familiares para la donación de órganos evidencian la generosidad, altruismo y solidaridad de los donantes españoles y sus familias”, han añadido a este respecto. Asimismo, han querido también reconocer públicamente la labor de todos los profesionales que “han hecho posible que miles de pacientes recuperen la salud o salven sus vidas”.

Para completar el círculo que hace posible la cadena de los trasplantes, los pacientes trasplantados han manifestado su “confianza” en el modelo de gestión que encabeza la ONT, remitiéndose para ello a los datos presentados el pasado 13 de enero por el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso. “Estos logros solo son posibles dentro de un sistema sanitario público que garantiza el acceso, en condiciones de igualdad, de todos los ciudadanos a un tratamiento de alto coste sanitario independientemente de la condición social o económica”, han manifestado agregando que, de esta manera, se hace posible “que ningún ciudadano tenga que empobrecerse por motivos de salud”.