Redacción. Madrid
La Agencia Antidroga ha desmentido "absoluta y categóricamente" que existan recortes en los recursos de la Agencia y que se esté desmantelando la atención psicológica y social de los dependientes.
![]() Almudena Pérez Hernando. |
Así ha respondido la Agencia a la concentración en la sede del organismo público de un centenar de personas que protestaban por "el desmantelamiento de la atención psicológica y social a los drogodependientes" y por "la disminución de presupuesto y supresión de subvenciones" según la concejala del PSOE en el Ayuntamiento, Carmen Sánchez Carazo.
En una conversación telefónica con Efe, la directora gerente de la Agencia, Almudena Pérez, ha asegurado que la entidad se está "modernizando y adaptando a las necesidades de los pacientes y a la realidad de la sociedad actual".
En relación a la atención social que reciben los drogodependientes, Pérez ha afirmado que continuará, aunque ha subrayado que "un drogodependiente es un paciente crónico y como tal hay que tratarlo". Un tratamiento que ha de ser "médico y psicológico, sin menoscabo de la atención a la social", ha especificado
La directora gerente de la Agencia Antidroga ha explicado que la narcosala de Las Barranquillas cerró el 31 de diciembre en cumplimiento del Plan de Erradicación del Chabolismo del Ayuntamiento de Madrid.
No obstante, Pérez ha negado que se hayan cerrado el resto de los recursos, como la comunidad terapéutica de Batán o trece pisos de reinserción.
Ha indicado que al Batán le sustituye un nuevo centro que arrancará su actividad en marzo y que se llamará Centro Residencial de Tratamiento para Drogodependientes, con cuarenta plazas en régimen residencial y veinte plazas en centro de día, destinadas a "facilitar la continuidad del tratamiento de estos pacientes".
Asimismo, Pérez ha explicado que una serie de pisos "ha cumplido el contrato y en marzo se pondrán en marcha nuevas plazas para pisos de apoyo al tratamiento".
Los pacientes que vivan en estos pisos, que se encuentran en una fase avanzada del tratamiento, tendrán la obligación, según Pérez, de acudir diariamente al Centro de Ayuda Integral al Drogodependiente (CAID) que se le asigne para recibir cuatro horas de terapia.
En cuanto a la duración de los programas de reinserción, la directora ha apuntado que ésta dependerá del "plan terapéutico de cada paciente, de su situación, adicción y evolución, siempre bajo el criterio de médicos y de psicólogos".