La justicia admite una querella contra Alba Vergés, exconsellera de Salut de la Generalitat de Catalunya. El juzgado de instrucción número 4 de Barcelona ha aceptado a trámite una querella de una asociación de la Guardia Civil por el retardo en la vacunación de sus agentes.
Aunque Vergés es diputada en el Parlament y, por tanto, aforada, el juzgado admite la querella de la Asociación Profesional de la Guardia Civil (Aprogc) y ha pedido al juzgado de instrucción número 17 que le remita las actuaciones que ha hecho en el mismo sentido para otra querella.
El magistrado instructor ha destacado que el 22 de abril sélo había un 6,3 por ciento de guardias civiles de Cataluña vacunados. Por el contrario, el 9,9 por ciento de los policías nacionales y más del 70 por ciento de mossos y policías locales habían recibido alguna dosis contra el Covid-19.
El juzgado estudiará ahora si Vergés podría haber cometido algún delito de discriminación y contra la seguridad en el trabajo.
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