María José Sáenz de Buruaga. |
Redacción. Santander
La consejera de Sanidad, María José Sáenz de Buruaga, ha defendido la fórmula concesional que el Gobierno regional ha decidido adoptar para las obras de la Fase 3 del Plan Director de Valdecilla como la “única alternativa” para acabarlas esta legislatura, “algo que no le cuadra” a su antecesora, la socialista Dolores Gorostiaga, que le ha preguntado “qué esconde” y ha achacado el cambio a que el Ejecutivo no tiene asegurado que el Estado vaya a pagarlas.
Cuestionada por Gorostiaga en el Pleno, Sáenz de Buruaga ha asegurado que el compromiso del Gobierno de España para pagar Valdecilla se mantiene “intacto” y ha explicado que su decisión de rescindir el contrato con la UTE que ejecutaba las obras no se debe a “falta de financiación”, sino a que la “rebeldía” de la empresas y los “incumplimientos” del contratista han llevado a la paralización de las obras.
“Instinto de protección”
En este sentido, ha cuestionado a Gorostiaga por los motivos de su “instinto de protección” a las empresas y le ha preguntado “de qué lado está”.
Así, Sáenz de Buruaga ha opinado que la socialista “tapa” a la UTE “porque detrás de sus incumplimientos está su incapacidad de gestión” cuando fue consejera de Sanidad la pasada legislatura y su “falta de coraje” para enfrentarse a las empresas, cediendo ante sus “presiones” y aceptando un nuevo modificado del proyecto, con su consiguiente sobrecoste.