El médico español Leopoldo Nieto Cisneros es una de las víctimas del terremoto de México, cuya cifra se aproxima ya a las 300 personas. Se trata del primer español del que se conoce su fallecimiento por el seísmo, aunque este jueves todavía quedaban ocho españoles sin localizar.
Nacido en Madrid, Nieto Cisneros tenía raíces enAlcázar de San Juan (Ciudad Real), según asegura la agencia EFE, y se trasladó a México tras concluir los estudios de Medicina en los años 70. Allí se especializó en la investigación sobre el VIH.
En el momento del seísmo, el investigador se encontraba en la Colonia del Valle, una de las zonas más acomodadas del Distrito Federal de México. Sus restos mortales han sido incinerados en la capital mexicana y serán trasladados a San Martín de Valdeiglesias (Madrid), donde reside su madre, de acuerdo con Europa Press.
Fuentes citadas por esta misma agencia añaden que todavía siguen buscando a uno de los hijos de la pareja de Nieto Cisneros, un joven de 22 años que se encontraba con él cuando el edificio se derrumbó por el terremoto.
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