Los millennials ven en la sanidad al mejor 'socio' de la tecnología

La adopción de la súltimas tecnologías beneficiará especialmente a la sanidad en España. Es una de las conclusiones que se extraen de los resultados de la encuesta mundial que ha llevado a cabo Global Shapers, una iniciativa del Foro Económico Mundial, en la que se pregunta a los jóvenes cómo ven el mundo y qué piensan hacer con esa situación global. 

Entre los 31.495 participantes de 186 países que han respondido a las preguntas entre el 31 de marzo y el 30 de junio de este año, aparece la visión de los jóvenes españoles. Para un 19,2 por ciento de ellos, la sanidad sería la más beneficiada por la incorporación de los avances tecnológicos, seguida de la energía con un 17,2 por ciento y de la educación, con un 16,2 por ciento. 

La importancia tecnológica en la sanidad varía según la zona geográfica donde se pregunte. Así, pasa de ser el sector más importante en Asia y Pacífico -junto a la educación- a ser el segundo en Norteamérica, Oriente Medio y Norte de Africa. En Europa y África cae a la tercera posición, mientras que en la zona sur de Asia ni siquiera aparece reflejada. 

La encuesta se ha estructurado en torno a cinco áreas, que abarcan Perspectivas Globales, Gobernabilidad, Valores, Tecnología y el Lugar de Trabajo. Entre ellas, se abordan líneas generales como la desigualdad, que incluye factores sociales -además de económicos- como una desigual distribución de derechos o acceso a servicios públicos, entre los que recogen la sanidad y la educación. 

Sector público a la cabeza

Además, para el 60,1 por ciento de los jóvenes entre 18 y 35 años, el sector público debe encabezar la gestión de los servicios sociales, incluyendo sanidad, educación y seguridad social, más que dejar estos en manos del sector privado. 

En líneas generales, los jóvenes se muestran muy preocupados por el cambio climático -un 48,8 por ciento lo considera el mayor problema del mundo aunque en España es la corrupción para un 82,5 por ciento-, desconfían de grandes empresas, gobiernos, bancos y medios de comunicación, son 'adictos al trabajo', optimistas con la tecnología y muestran interés por los otros, según reflejan las cuestiones sobre acogida a refugiados -el 72,6 por ciento les abriría las puertas de su país-.