La compatibilidad pública-privada suma voces contra la falta de médicos

La sanidad española tiene "sequía" de profesionales. La privada estima que, para 2027 se necesitarán 9.000 médicos más al año en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Conscientes de esta problemática, propone una serie de medidas con las que considera que la situación mejorará, como reducir los requisitos de incompatibilidad para trabajar en la pública y en la privada. Algo que ya ha puesto encima de la mesa política.

Pero antes de tomar cualquier medida concreta, lo fundamental es conocer de primera mano qué hace falta. Es por ello que desde la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) proponen que en primer lugar se realice una "mejor planificación de las necesidades de recursos humanos a medio y largo plazo", contando con el ámbito público y también con el privado.

"Pedimos que, para buscar soluciones adecuadas, se tenga en cuenta a la sanidad privada en el marco de las necesidades de profesionales del SNS. Proponemos seguir ahondando en la colaboración con el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas", se ha insistido desde la patronal presidida por Carlos Rus.

En cuanto a las medidas concretas para dar la vuelta al déficit de personal sanitario, destaca la reducción progresiva de las incompatibilidades de ejercicio de los profesionales en la sanidad pública y la privada, "adaptando la normativa a la realidad actual para evitar diferencias interpretativas en las comunidades autónomas". Precisamente, Asturias ha sido la última comunidad en dar pasos al respecto. Los asturianos que compaginan ambos sectores sufren una ‘penalización’ económica que roza los mil euros cada mes. Ahora, la consejera de Salud, Concepción Saavedra, ha explicado que se reunirá con los sindicatos para minimizar esta merma retributiva, aunque ha avisado de que no desaparecerá.

Mayor agilidad en los procesos de homologación

Esta no es la única medida de para esta fórmula. Para asegurar la disponibilidad de los especialistas más demandados, desde ASPE piden avanzar en los procesos de reespecialización médica, para que ningún facultativo tenga que presentarse de nuevo al MIR, sino simplemente completar la formación restante en un periodo de tiempo más corto y también con una evaluación de competencias.

"La experiencia acumulada y la formación continuada son garantía de que los profesionales que se forman en España son de la más alta capacitación y esto brinda al sistema la oportunidad de aprovechar esas fortalezas con el objetivo de facilitar que los profesionales sean especialistas en varias áreas", ha defendido el sector privado.

También se pide mayor agilización de los procesos de homologación y equivalencias de títulos universitarios de diferentes países.

La falta de profesionales no solo afecta a los facultativos. Los recursos humanos de la Enfermería también se encuentran en horas bajas. Para paliarlo, desde ASPE proponen consolidar el rol del personal para "implementar al máximo sus competencias y desarrollo profesional". Para ello, desde la patronal consideran importante reforzar y ampliar la formación de los Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería pasando a ser un Grado Superior, con un programa “más completo y más horas de formación”.

Los datos del déficit

Carlos Rus ha advertido recientemente sobre las necesidades de profesionales sanitarios. Lo ha hecho en el encuentro ‘Sistema Sanitario Sostenible: análisis y propuestas para lograr una gestión óptima de los profesionales sanitarios garantizando la Seguridad de los Pacientes’ de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (Sedisa). En esta charla ha recordado que la edad media del facultativo español es de 50 años, lo cual supondrá un problema dentro de 15 años, cuando casi la mitad de los especialistas se jubile, según ha defendido.

La especialidad que acusará en mayor medida estas jubilaciones es Cirugía Ortopédica y Traumatología, que perderá 284 médicos en el próximo lustro. Le siguen Obstetricia y Ginecología y Anestesiología y Reanimación.

En cuanto a la Enfermería, Rus aseguró que el 95 por ciento de los hospitales privados presenta una necesidad media-alta de estos profesionales.