Las agresiones a médicos se disparan un 38% y baten el récord histórico

Las agresiones a los médicos que ejercen en el Sistema Nacional de Salud (SNS) protagonizaron un nuevo repunte en 2022 hasta alcanzar las 843 ataques, lo que supone un incremento de casi el 38 por ciento en comparación con el año anterior. Los datos recopilados por los colegios profesionales representan un nuevo récord histórico, marcado por el alto volumen de incidencias en Atención Primaria.

Los profesionales que atienden en los centros de salud han vuelto a colocarse como el colectivo más afectado. El 43 por ciento de los casos se han producido en este nivel asistencial, aunque representa un ligero retroceso con respecto a las cifras de otros ejercicios. Las especialidades hospitalarias (27 por ciento) o las Urgencias (17 por ciento) han sido los otros focos mayoritarios.

Tomás Cobo, presidente de la OMC; y José Santos, presidente de CEOM.

Los datos del Observatorio Contra las Agresiones de la Organización Médica Colegial (OMC) han revelado que el 84 por ciento de los casos notificados estuvieron relacionados con insultos, vejaciones o amenazas, mientras que el 16 por ciento restante fue resultado de ataques físicos. Como resultado, las lesiones entre los facultativos se han incrementado un 3 por ciento en 2022.

Tomás Cobo, el presidente del Consejo General de Médicos, ha advertido en la presentación de las cifras que algunos casos han resultado “francamente catastróficos” como la agresión que sufrió un médico del Servicio Cántabro de Salud que ha perdido el 80 por ciento de la visión en un ojo como consecuencia de una “brutal paliza”. “Estaremos alerta para que caiga sobre estos agresores todo el peso de la ley”, ha enfatizado.

A pesar de el alto volumen de agresiones médicas, únicamente un 10 por ciento de los casos han terminado requiriendo una baja para el personal afectado. Una cifra muy reducida que desde los colegios profesionales atribuyen a la voluntad de los facultativos para continuar en su puesto de trabajo en un momento marcado por la alta presión asistencial después de la pandemia de Covid-19.

Tomás Cobo presenta el Observatorio Contra las Agresiones.

Las mujeres jóvenes, protagonistas de las agresiones médicas

Las estadísticas del Observatorio han permitido también realizar una radiografía sobre el perfil profesional más afectado por las agresiones. Las mujeres representan el 61 por ciento de los casos que se han denunciado ante los colegios, especialmente en el tramo de edad más joven ubicado por debajo de los 35 años. Aunque los datos fluctúan en función de las comunidades autónomas.

En cuanto a los agresores, en casi la mitad de los casos (48 por ciento) corresponde con un paciente programado, lo que mantiene la tendencia de los últimos años. Un 28 por ciento son enfermos que no cuentan con una cita prevista, mientras que otro 22 por ciento de los ataques están propiciados por acompañantes o familiares.

Las razones que han derivado en estas agresiones están vinculadas en la mayoría de los casos con causas derivadas de la práctica asistencial (79 por ciento), fundamentalmente por las discrepancias con el diagnóstico recibido, las disputas personales o la receta. Mientras que el otro 21 por ciento tienen relación con aspectos estructurales como el tiempo de demora, el mal funcionamiento del centro o la gestión de trámites del Covid-19.

Los autores del informe han apuntado a que aspectos como el incremento de las consultas en la época postpandemia han influido en el récord de agresiones que se han producido este año. “Algunos hemos vivido de cerca que la demora en consultas ha provocado que cuando han llegado a la consulta ha habido diagnósticos catastróficos”, ha apuntado el secretario general de la OMC, José María Rodríguez.

José María Rodríguez Vicente, secretario general del Cgcom.

Las agresiones a médicos en Europa

Más allá de las cifras nacionales, la presentación del observatorio ha permitido hacer una radiografía sobre la tendencia en el conjunto de la Unión Europea. Países como Francia, Portugal o Bélgica han presentado también sus cifras, mientras que han reclamado que se articule un mecanismo comunitario para contar con una cifra oficial en todo el viejo continente.

Francia ha contabilizado 1.009 agresiones a médicos, lo que supone también su tope máximo y representa un salto cuantitativo con la media de 820 de las últimas dos décadas. En seis de cada 10 ocasiones, estos ataques han tenido lugar en Atención Primaria. Mientras que las especialidades hospitalarias más golpeadas por este problema han sido Oftalmología, Psiquiatría, Dermatología y Ginecología.

Sin embargo, han lamentado que en más de la mitad de los casos los facultativos hayan descartado llevar su situación a los tribunales. “Las fuerzas de seguridad no tienen información. Crea dificultades para perseguir a los agresores”, ha enfatizado Philippe Cathala, delegado de asuntos europeos e internacionales del CNOM.

Presentación del observatorio.

En una línea similar se ha situado Portugal que en el último ejercicio ha contabilizado 1.632 agresiones a personal sanitario. Tras la reducción marcada por el descenso de las consultas durante la pandemia, las cifras se han colocado de nuevo en máximos históricos. Mientras sus profesionales reclaman más labor de “prevención” a las administraciones públicas. “Tenemos una nueva ley penal en la que se dice que la violencia contra los profesionales de la sanidad tiene que ser una prioridad con medidas preventivas”, ha apostillado Filipa Lança, delegada del área internacional de la Ordem dos Médicos.

En Bélgica se han identificado 434 agresiones en el último año, de las cuales 258 fueron de carácter verbal, lo que representa casi el 60 por ciento. Al igual que el resto de sus vecinos europeos, el país ha contabilizado la mayor parte de los casos en la Medicina de Familia (61 por ciento), lo que confirma que este nivel asistencial es sistemáticamente el más golpeado.

Con todos estos datos sobre la mesa, el presidente del Consejo Europeo de órdenes Médicas (CEOM), José Santos, ha hecho un llamamiento para que se articulen nuevas estrategias y protocolos innovadores en el continente para acabar con las agresiones y demostrar “tolerancia cero” con los que las cometen. “Toda la gente tiene derecho a trabajar en un espacio seguro sin violencia”, ha concluido.

Elvira Velasco, portavoz del Partido Popular en la Comisión de Sanidad en el Congreso; y José María Rodríguez Vicente.

Manuel Yanguas, interlocutor policial sanitario; y María Isabel Moya, vicepresidencia primera del CGCOM.

Mª Rosa Arroyo Castillo, vicesecretaria de la OMC; Manuel Yanguas, María Isabel Moya, José María Rodríguez Vicente y Ángel Barca, comandante de la Policia Nacional.

Tomás Cobo charla con Manuel Yanguas.

María Isabel Moya saluda a Elvira Velasco.

Tomás Cobo y Ángel Barca.

José María Rodríguez Vicente, Tomás Cobo y Elvira Velasco.

Joan Carrera, vicesecretario y vicetesorero del Consejo de Dentistas de España; Elena Carrascosa, presidenta de Consejo General de Podología de España; y Raquel Martínez, secretaria general del Consejo General de Farmacéuticos.

José María Rodríguez Vicente, Elena Carrascosa, Raquel Martínez y Joan Carrera.

Foto de familia de la Jornada europea 'Agresiones al personal sanitario'.