El examen PIR 2022 vuelve a ser "asequible" pero con preguntas "más densas"

El PIR 2022 ha sido un examen distinto al del año pasado, cuando fue “totalmente incontrolable”. Así lo asegura a Redacción Médica una de las 4.435 aspirantes que se han presentado a esta prueba en España, con el objetivo de obtener una de las 204 plazas ofertadas por el Ministerio de Sanidad para las titulaciones del ámbito de la Psicología. Esta aspirante señala que las preguntas han sido “excesivamente densas” y que un importante volumen de las mismas se ha basado en encontrar el enunciado falso entre las cuatro posibles respuestas.

“Han sido preguntas muy densas, por lo que las tenías que leer detenidamente. Me ha faltado tiempo para contestar”, continúa esta psicóloga, que arroja que han prevalecido las cuestiones de tratamientos sobre las de cualquier otra materia. En este sentido, destaca que se han preguntado por programas "muy específicos" y que han tenido protagonismo patologías como la psicosis y los trastornos neurodegenerativos.

Además, esta psicóloga explica que el Covid-19 no ha estado presente en ninguno de los interrogantes y que ha echado en falta preguntas relacionadas con suicidios. “No han hecho preguntas de suicidio y autolesiones, que han aumentado mucho entre población infantojuvenil. No obstante, sobre trastornos infantiles sí que han preguntado, como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) o conductas disruptivas. 

PIR 2022, "más asequible que otros años"

Según otra candidata a la prueba, el PIR 2022 ha sido “más asequible” que en anteriores convocatorias. Sin embargo, sostiene que “la conclusión es la misma”: “No hay un temario cerrado, por lo que es difícil controlar el examen. Este año han salido muchas preguntas que no estaban relacionadas con la Psicología Clínica”.

En el PIR 2021, los psicólogos opositores criticaron la “complejidad y dificultad” que el Ministerio de Sanidad “suma una prueba ya por definición inabarcable". Asimismo, gran parte del colectivo siente que se les trata de “equiparar con a la profesión médica”, especialmente con las pruebas de las últimas tres convocatorias.

“En este sentido, ha habido un cambio. El contenido del examen ha estado mucho más relacionado con la Psicología que el del año pasado, que estuvo muy alegado de la Psicología Clínica, y se ha ‘frenado’ la tendencia biologicista de convocatorias anteriores”, concluye esta candidata a la prueba para psicólogos.