Cataluña, a la cabeza en inversión tecnológica en centros privados

El 46 por ciento de los hospitales privados de Cataluña tienen equipos de alta tecnología, según el último informe ‘Sanidad privada, aportando valor: Análisis de la situación 2016’ publicado por el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS). Un porcentaje que sitúa a esta comunidad autónoma como líder indiscutible en inversión tecnológica (también porque es la que más centros privados tiene), seguida muy de cerca de Baleares (37 por ciento), Galicia y Comunidad Valenciana (34 por ciento), Canarias (33 por ciento), País Vasco (31 por ciento) y la Comunidad de Madrid (30 por ciento).

La Rioja, por su parte, se posiciona como la región con menos equipamiento tecnológico en sus centros sanitarios (solo el 8 por ciento de ellos), porque también es la comunidad con menos hospitales de estas características tiene (solo superada por Ceuta y Melilla, que cuenta únicamente con hospitales públicos).

Con este informe, el IDIS quiere demostrar la apuesta decidida que hacen los centros sanitarios por la innovación en el diagnóstico, la terapéutica y la prevención. De hecho, el 56 por ciento de los hospitales privados poseen el 56 por ciento de las resonancias magnéticas, el 47 por ciento de los PET y el 36 por ciento de los TAC. “Debido a su propia idiosincrasia y razón de ser, el sector sanitario privado va a seguir invirtiendo en innovación y en tecnología puntera”, explica Luis Mayero, secretario general del IDIS.

El 50% de los ensayos clínicos se hacen en la privada

Asimismo, en la reciente presentación de los datos del Proyecto BEST de Excelencia en Investigación Clínica, -promovido por Farmaindustria-,  se puso de manifiesto el importante crecimiento del número de ensayos clínicos con participación de centros privados, cercano al 50 por ciento, con un incremento por encima del 25 por ciento respecto al año previo.

En esta ocasión, Madrid, Cataluña, Navarra y Comunidad Valenciana son las autonomías que cuentan con un mayor número de participaciones, especialmente en fase I, de los últimos cinco años. Por áreas terapéuticas, Oncología, Cardiovascular y Respiratorio son las que más incidencia tienen en el número de ensayos clínicos.

Los centros privados han mostrado mejores resultados en todos los indicadores, como en el tiempo global para enviar la documentación hasta la inclusión del primer paciente en el ensayo; hasta la recepción del contrato firmado; desde la recepción del contrato a la inclusión del primer paciente; en la tasa de reclutamiento medio; en ensayos sin reclutamiento; en la velocidad para realizar estos procesos y en los pacientes reclutados por centro.

“Es necesario estimular el emprendimiento y la innovación en todos los ámbitos del sector de la salud, mediante el establecimiento de nuevos y mayores incentivos, y a través de un pacto por la innovación que involucre a todos los agentes implicados en post de la eficiencia, el buen uso de todos los recursos disponibles y en beneficio del paciente”, afirma Mayero. 

La privada, clave en el despegue socioeconómico de España

Por su parte, Adolfo Fernández-Valmayor, presidente del IDIS, ha recalcado que “sería imposible pensar en el despegue socioeconómico que tanto precisa nuestro país sin la involucración de un sector tan relevante como el de la sanidad y la salud y, para ello, son imprescindibles algunos condicionamientos esenciales”. Fernández-Valmayor hace referencia a un escenario estable y predecible de futuro; a una apuesta decidida en I+D; a un estímulo a la internacionalización de España en sanidad; y a un reconocimiento expreso a la tarea de emprender e impulsar proyectos innovadoras en salud.

Una idea que comparte el director general de esta organización, Manuel Vilches, quien considera además que “todos los recursos sanitarios deben ser aprovechados al máximo, logrando una integración entre los sistemas público y privado que contribuya al mantenimiento de los servicios para la población y que ponga a disposición de los pacientes los últimos avances”. Y añade: “sin duda, el sector privados es un buen ejemplo de ello, debido a que realiza una apuesta sólida por adquirir equipos punteros y tecnología de última generación que permite diagnosticar a más pacientes y tratarlos mejor en un menor tiempo, lo que redunda tanto en mejores resultados clínico como en un menor coste por tratamiento”.