Astellas ha vuelto a ser suspendida por la Asociación Británica de la Industria Farmacéutica. Los fallos en ofrecer información actualizada sobre los cambios en sus medicamentos han sido calificados como de una "lamentable falta de preocupación por el paciente". Esta suspensión se une a otra anterior, lo que ha movido a la 'farmaindustria' británica a plantear su expulsión definitiva, cosa que puede 'alcanzar' el próximo octubre si no hay cambios sustanciales en la política de la empresa.