Jesús Sobrino y Roman Stampfli, directores generales en España de UCB Pharma y Amgen.
Malas noticias para
Amgen y UCB Pharma (en imagen, sus responsables en España). Un
ensayo clínico ha demostrado que su fármaco contra la osteoporosis en desarrollo,
romosozumab, provoca
efectos secundarios graves relacionados con el
corazón. De hecho, las compañías ya descartan que la
FDA dé su visto bueno para que el producto se comercialice en Estados Unidos. Las
consecuencias bursátiles de esta noticia no se han hecho esperar: el valor de las acciones de la multinacional belga ha caído un 13 por ciento y los consultores esperan que el de las de la biotecnológica americana los hagan hasta un 4 por ciento.
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