Redacción. Madrid El pasado sábado, el viceconsejero de Sanidad del País Vasco, Jesús Mari Fernández, se oponía frontalmente al calendario vacunal del Ministerio, contradiciendo así el supuesto acuerdo alcanzado en el último Consejo Interterritorial. En declaraciones a la Cadena Ser, Fernández se apoyó en el dictamen del Consejo Técnico Asesor de Vacunaciones de Euskadi, especialmente desfavorable en lo que respecta a la vacuna infantil de la hepatitis B. El Ministerio ha respondido que "por debajo de la autoridad del consejero" no acreditan las valoraciones, mientras que la Consejería vasca se reafirma en su postura "porque en el Consejo Interterritorial no se firmó ningún acuerdo ni se votó nada".
Tal y como adelantó Redacción Médica, País Vasco es una de las siete autonomías (Baleares, Canarias, Cataluña, La Rioja, Murcia y Navarra) que ‘chocan’ con el plan propuesto por la ministra Ana Mato de administrar dicha profilaxis tras el parto, a los 2 y 4 meses, ya que estos servicios de salud lo aplican a partir de los 2 meses, siendo la última y tercera dosis a los 6 meses (la segunda, a los 4 meses). Imponer las cohortes de edades ministeriales supondría un gasto logístico hospitalario que la autonomía que dirige Patxi López parece no estar dispuesta a afrontar. Por otro lado, el informe técnico del Consejo Asesor vasco resalta los buenos resultados obtenidos en los 12 años de experiencia acumulados, en los que ningún recién nacido ha sido diagnosticado con hepatitis B, y resalta que la pauta vasca pemite administrar seis antígenos "en la misma visita y en un solo pinchazo", mientras que introducir la dosis en el recién nacido supone "añadir un nuevo pinchazo sin ninguna ventaja adicional". |