Javier Leo. Madrid
La delegación española, cuyos miembros y temas a defender no ha confirmado el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad al cierre de esta edición, se verá ante la difícil papeleta de explicar a sus colegas europeos las recientes medidas aprobadas por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, entre las que se encuentran la modificación del copago farmacéutico, las duras restricciones al turismo sanitario, en especial el procedente de ciudadanos de la UE, o el fomento del consumo de medicamentos genéricos.
La necesidad de fortalecer la innovación sanitaria para emerger con éxito de la crisis financiera y afrontar con éxito el envejecimiento de la población y el aumento de las enfermedades crónicas, deben ser paralelos a la salvaguarda de los sistemas sanitarios de alta calidad, defiende la presidencia europea. Mejorar la seguridad del mercado de productos sanitarios Ante los recientes problemas de seguridad causados por los implantes mamarios PIP y el reemplazo de prótesis metálicas de cadera defectuosas, los ministros de la UE también discutirán la manera de abordar problemas de seguridad con productos sanitarios en el futuro, fortaleciendo la seguridad de los pacientes en el campo de los implantes y otros productos médicos de alto riesgo. “Espero que este encuentro con mis colegas europeos nos ayude a encontrar inspiración mutua y nuevas formas de acción en nuestros sistemas sanitarios”, asegura la ministra de Sanidad de Dinamarca, Astrid Krag, anfitriona del encuentro. “Muchos perciben la innovación como un lujo. No lo es. La innovación es una necesidad en la asistencia sanitaria y no debemos verla como un obstáculo a la hora de trabajar de forma inteligente en sanidad”, apunta Krag. “Estamos convencidos de que alcanzaremos acuerdos para reforzar una futura colaboración que permita compartir conocimiento y evite que cada país tenga que comenzar de cero sus reformas. Debemos establecer una dirección común para el futuro de legislación europea en materia sanitaria”, concluye. |