Lamata asegura que al nuevo Gobierno regional le “falta diálogo” para solucionar problemas

Redacción / EP. Guadalajara
El ex consejero de Salud y Bienestar Social de Castilla-La Mancha y diputado regional por Guadalajara, Fernando Lamata, ha acusado al nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha de "falta de dialogo" para solucionar los problemas que surgen debido a la crisis económica.

Fernando Lamata.

En rueda de prensa, el también diputado regional por Guadalajara ha reconocido que tanto ahora como antes se producen dificultades en los pagos "pero en los últimos tres años los fuimos gestionando con las empresas o colectivos afectados, de manera que se mantenía la confianza y las expectativas de cobro y no se detenían las obras o se dejaban de llevar a cabo los diferentes servicios públicos".

Es por ello que Lamata, acompañado de la secretaria provincial de los socialistas, ha asegurado que "sin duda" las obras de ampliación del Hospital General Universitario de Guadalajara, que ahora están paradas, continuarían adelante si José María Barreda hubiera seguido al frente del Gobierno autonómico.

En ese sentido, la secretaria provincial del PSOE, Maria Antonia Pérez León ha afirmado que Maria Dolores Cospedal y su Gobierno han puesto en marcha "la teoría del caos". Una teoría que, según Pérez León, han aplicado de manual "poniendo todo patas arriba para ir, después, solucionado algo y generar así una especie de Síndrome de Estocolmo entre los afectados".

La responsable socialista ha reconocido que la situación económica no es buena y es necesario poner en marcha un plan de ahorro "pero no este plan". Según Maria Antonia Pérez, los actuales gestores de la Junta "no han hecho bien el diagnóstico y en el tratamiento se han pasado de dosis, generando un plan tóxico".

Concretamente, la secretaria provincial del PSOE ha afirmado que el Plan de Garantía de Servicios Sociales Básicos de Cospedal va a destruir 2.000 empleos directos en la provincia de Guadalajara "ligados a la educación, la sanidad y los servicios sociales". Según Pérez León "es un plan que consigue destruir empleo en aquellos servicios que necesitan las personas más débiles de la sociedad".