La nueva regulación se integrará en la Ley de Adicciones que llegará el próximo año al Parlamento



12 dic. 2011 13:35H
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Redacción. Vitoria
El Gobierno vasco prepara una nueva regulación permisiva del consumo "responsable" del cannabis o marihuana de las personas mayores de edad siempre que se cumplan dos principios básicos: información de las consecuencias y respeto al derecho a la salud del resto de los ciudadanos. Esta nueva regulación se integraría en la Ley de Adicciones que llegará el próximo año al Parlamento Vasco.

El consejero de Sanidad Rafael Bengoa.

El viceconsejero de Sanidad, Jesús María Fernández, ha anunciado esta noticia durante la presentación del VI Plan de Adicciones 2011-2015, y ha planteado la necesidad de "una nueva regulación del cultivo, la venta y el consumo de cannabis en nuestra sociedad para legislar los vacíos legales que existen con el criterio de que es mejor ordenar que prohibir conductas ya consolidadas en la sociedad". Fernández ha reconocido que se trata de una regulación "compleja" desde el punto de vista de la técnica jurídica y ha explicado que barajan varias alternativas con la vista puesta en tener listo el proyecto de ley durante los primeros meses de 2012.

Eso sí, ha dicho que el criterio general será "dejar un cierto espacio a la autonomía personal siempre y cuando se garanticen dos criterios básicos". "Asegurar que existe una información completa sobre las consecuencias que tienen determinados consumos, y respeto absoluto al derecho a la salud de las demás personas", ha precisado.

El consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, ha estado presente también en la presentación del VI Plan de Drogodependencias y ha insistido en las mismas ideas a la hora de analizar las claves de la nueva regulación. "La lógica general es no ser prohibicionistas, asegurar que la gente se hace responsable gracias a la educación y la información, y que haya todos los elementos de autorregulación que se sobrentienden".

Asociaciones

El Departamento de Sanidad afronta este trabajo con la convicción de que las leyes basadas en la prohibición tienen como consecuencias "la clandestinidad, la delincuencia, los mercados negros y las injusticias en los países productores". Y subraya que los estudios e informes de las autoridades sanitarias internacionales y el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías así lo demuestran. Para la elaboración de la nueva regulación del cultivo y consumo de marihuana, regulación que se insertará en una norma más amplia como la Ley de Adicciones, hay un diálogo fluido con las asociaciones de consumidores de cannabis. De hecho, un representante de estas asociaciones forma parte del Consejo Asesor de Drogodependencias y el Departamento de Sanidad mantiene contactos con estas organizaciones.

La directora de Drogodependencias, Celina Pereda, ha indicado que participaron en un debate organizado por el Ararteko sobre los usos y seguridad jurídica en torno al cannabis, y ha afirmado que van a continuar "en esta línea para avanzar con las personas que se organizan en asociaciones de usuarios de cannabis. Ellos organizan la producción para su consumo personal y colaboran también en las medidas de sensibilización y prevención".

Así, ha destacado, las asociaciones que trabajan con la Dirección de Drogodependencias "informan y aconsejan contra el consumo por parte de los menores de 18 años por el riesgo que tiene el cannabis para las personas cuyo sistema nervioso no está desarrollado completamente. Y sobre todo esos menores que consumen antes de entrar a clase cuando está demostrado que daña la memoria y provoca falta de atención".

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