Eva Fariña. Imagen: Pablo Eguizabal. Madrid
José Martínez Olmos, secretario general de Sanidad, se ha mostrado “moderadamente optimista” respecto a la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS), si bien ha reconocido que la sanidad española necesita afrontar ciertos ajustes. En cuanto a las “líneas de mejora”, ha destacado “la calidad asistencial y la equidad del sistema”. También se ha mostrado rotundamente en contra de la aplicación del copago, puesto que “es inútil y genera barreras de acceso”.
José Martínez Olmos se ha mostrado optimista respecto |
Por el contrario, ha optado por otras medidas “para generar recursos a corto plazo”, como el uso racional de los medicamentos y su dosificación personalizada, el control de compras, etc. Durante su intervención en el desayuno organizado por la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS), Martínez Olmos ha apostado por practicar una gestión “más transparente, para que los usuarios sepan a qué se destina el presupuesto sanitario”; ha incidido en la necesidad de invertir en tecnología sanitaria basándose en criterios de coste-efectividad y ha reconocido que es necesario mejorar la gestión del turismo sanitario extranjero.
Entre los valores más positivos de la sanidad española, el dirigente del Ministerio de Sanidad ha destacado la “modélica Organización Nacional de Trasplantes”, la “oferta de calidad de la Atención Primaria” o el sistema español de farmacia, formado por oficinas “altamente cualificadas”. “Por respeto a los profesionales y a los pacientes, puede ser un error hablar del futuro solo en términos de sostenibilidad”, ha añadido. En su opinión, el sistema sanitario es un “amortiguador de los efectos de la crisis”, y se ha preguntado qué pasaría con los sectores sociales más desfavorecidos de la población si no tuvieran un sistema sanitario público.
Juan José Rodríguez Sendín (izq.), presidente de la Organización Médica Colegial, presentó a José Martínez Olmos, secretario general |
Además, Martínez Olmos se ha referido al papel del Consejo Interterritorial del SNS, y ha lamentado que no se cumplan sus acuerdos: “Para que sus decisiones sean jurídicamente vinculantes habría que cambiar los estatutos de autonomía, y no creo que se vayan a cambiar por este motivo. En cualquier caso, el CI es un órgano de toma de decisiones por parte de la comunidades autónomas, y creo que estas decisiones deben ser vinculantes; de hecho, la inmensa mayoría de los acuerdos se cumplen”.
El secretario general de Sanidad también se ha referido a la deuda sanitaria española, “que es conocida y reconocida, no tiene por qué afectar a la presentación de las cuentas ante la Unión Europea”, pero hay que afrontarla. “Me gustaría oír la oferta de las CCAA para cancelar la deuda. Siempre ha habido deuda a los proveedores, también antes del año 2004, como pueden atestiguar Fenin y Farmaindustria”. En este punto, ha respondido al presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, quien ha comentado en ABC que “no hay dinero para acabar el año en la sanidad pública”. En este sentido, Martínez Olmos ha recordado que “nunca hay dinero” en la sanidad para acabar el año, “tampoco cuando Feijoo estaba en el Insalud; siempre ha habido insuficiencia de recursos en Sanidad”.
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En el turno de preguntas, Juan Abarca Cidón, secretario general del Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS) le ha planteado la necesidad de sellar un pacto entre la sanidad pública y la privada. Martínez Olmos se ha mostrado conforme, y ha explicado que el Ministerio tiene “una línea de trabajo para fomentar la calidad del sistema sanitario privado”, algo que considera positivo porque “genera competencia al sistema público”. Además, ha señalado que no es partidario de “redefinir la situación de las mutuas” ni de tomar medidas para que la contratación de sanidad privada sea desgravable. “Soy partidario de que la sanidad esté financiada por los impuestos. Respeto la opinión de que la sanidad privada pueda desgravar, pero creo que es una cuestión más financiera que sanitaria”.