La guerra de precios y la crisis del mutualismo administrativo mueven el sector

Microaseguramiento y 'millennials' marcan el futuro del seguro de Salud
Joaquín Chamorro, Tomás Merina, Juan Carlos de Castro, Miguel Ángel Vázquez y Jaime Ortiz.


3 dic. 2016 21:10H
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POR @CRISTINAALCALAL
Al seguro de Salud, la crisis económica apenas le ha afectado. Si bien es cierto que este tipo de aseguramiento crece más despacio de lo que lo hacía antes de 2008 (cuando experimentaba subidas por encima de los dos dígitos), tanto el número de clientes como el volumen de primas han ido en ascenso a lo largo de los años. Sin embargo, no debe bajar la guardia –según los expertos– ya que el futuro que se le presenta no será tan calmado. Por un lado, el sector vive actualmente una ‘guerra de precios’ constante que podría poner en peligro la calidad del producto y, por otro, uno de sus modelos ‘estrella’, el de mutualismo administrativo, no pasa por su mejor época: los recortes presupuestarios y el envejecimiento de los funcionarios pone en riesgo su continuidad. Ante este escenario, al seguro de Salud se le presentan dos opciones de continuación: el microaseguramiento como nuevo producto, y los ‘millennials’ (los nacidos a partir de los años 80), como nuevo nicho de mercado.

Muface debe incorporar nuevos colectivos.

Según los últimos datos de Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA), el seguro de Salud cuenta ya con más de 11 millones de clientes en España. ¿Es la mayor cifra de negocio que ha alcanzado? ¿Cómo han afectado los años de crisis a este producto?

Joaquín Chamorro, director ejecutivo regional de Sanitas Seguros: El seguro de Salud, a pesar de la crisis, ha estado en constante desarrollo. Es cierto que antes de este periodo, nuestro crecimiento estaba por encima de los dos dígitos y, actualmente, está en el 3,9 por ciento. Por eso, desde Sanitas somos optimistas, ya que nuestro incremento se sitúa en el 4,73 por ciento por encima del mercado en el primer semestre.

¿Cuáles son las principales amenazas y oportunidades del seguro de Salud en España?

Jaime Ortiz, director Comercial y de Marketing de Asisa: En Salud crecemos en primas pero también en asegurados y las amenazas y las oportunidades van surgiendo a medida que hay más clientes, por lo que las aseguradoras debemos adaptarnos a esta demanda. Los clientes que actualmente se están incorporando a este sector no son los que lo hacían hace 20 o 30 años. Ahora tenemos a los ‘millennials’ -la generación del siglo XXI- que necesitan otros seguros y debemos conectar con ellos de una forma diferente. Las necesidades están mediatizadas por la cobertura que da la sanidad pública, que hace que el cliente quiera esa rapidez en la forma de contactar con la compañía.

¿Qué características tiene el asegurado en Salud? ¿Ha evolucionado su perfil a lo largo de los años o se ha mantenido en el tiempo?

Tomás Merina, tesorero de Alianza para la Sanidad Privada Española (ASPE): En general, hay dos tipos: el de asegurado antiguo que viene de la época de los años 50; y el de nuevo, que es consciente que tiene doble aseguramiento pero que quiere tener otro nivel de confort. Además, estos productos tienen mayor implantación en zonas industriales como Cataluña, País Vasco, Baleares y Madrid.

¿Este tipo de aseguramiento tiene un público más femenino o predominan más los hombres? ¿Qué edades suelen contratarlo?

Tomás Merina: El sector asegurador en España tradicionalmente ha sido contratado por las mujeres de clase media para las especialidades de Ginecología y Obstetricia y para Pediatría.

El seguro de Salud no es la única modalidad relacionada con el sector sanitario. El médico cuenta con el seguro de Responsabilidad Civil Profesional para ejercer su actividad. ¿Qué garantías le da? ¿De qué manera repercute en su vida laboral?

Miguel Ángel Vázquez, responsable Comercial de Colectivos de AMA: La Ley de Ordenación de los Seguros Sanitarios dice que todos los profesionales que trabajan en la privada tienen que tener contratado un seguro. Por tanto, el seguro cumple dos funciones claras: el aseguramiento del patrimonio del médico -que se ve reforzado-, y para cubrir las reclamaciones de terceros.

En este sentido, AMA es líder en la sanidad privada, porque llevamos más de 22 años trabajando para los profesionales y, por tanto, tenemos una especialización que nos permite dar este tipo de cobertura. Los pacientes cada vez reclaman más, especialmente, tras el nuevo baremo de daños personales.

ASPE explica las características del seguro de Salud.

¿Existen datos de cuánto han evolucionado las reclamaciones en materia de la asistencia sanitaria?

Miguel Ángel Vázquez: Depende por las profesiones. Enfermería, por ejemplo, tiene menos reclamaciones que Medicina y, dentro de este sector, Cirugía Plástica es de las especialidades que más reclamaciones tiene, seguida de Ginecología y Traumatología. Lo que sí es evidente es que cada año hay más reclamaciones (por pacientes más informados), pero también hay un exceso de denuncias “por si toca”. Para estos casos, AMA tiene un equipo muy importante de abogados que se dedican a defender a los profesionales y a discernir si la reclamación está fundada o no. Además, seguirán aumentando tras el efecto del bueno baremo, donde los jueces valorarán los siniestros en función de esta nueva normativa.

En España existe una modalidad de aseguramiento sanitario enfocada exclusivamente para los funcionarios: el mutualismo administrativo, que puede ser por la vía pública o la privada. ¿Qué futuro tiene en España? ¿Perdurará mucho más este modelo?

Juan Carlos Castro, vocal de CSI-F en el Consejo General de Muface: Desde CSI-F creemos que sí, porque incluso sin la presencia de un director general, consideramos que el mutualismo administrativo, a parte de la originalidad que presenta como forma de casar la iniciativa privada y la pública, tiene futuro. Lo que ha sucedido con la crisis es que ha habido una disminución de la participación del Ministerio de Hacienda en las contribuciones de los asegurados y estamos esperando a ver lo qué sucede con el nuevo Gobierno.

El único problema que tiene Muface no es la falta de financiación sino que la pirámide de población se está invirtiendo. Hemos pasado de tener un 80 por ciento de trabajadores en activo y un 20 por ciento de jubilados, a un 67/33 por ciento, respectivamente. El envejecimiento es claro pero esperamos que con las nuevas ofertas de empleo público se empiece a compensar esta falta de personal.

Además del envejecimiento de los funcionarios, Bruselas ha anunciado recientemente que España debe recortar 5.500 millones de euros si quiere cumplir el déficit. ¿Pone esta situación en peligro el concierto de 2016/2017 que Muface tiene firmado con las compañías aseguradoras?

Juan Carlos Castro: Somos optimistas y confiamos en que no. El concierto actual se firmó a finales del 2015 y abarca el periodo 2016/2017. Hay una serie de exigencias que queremos hacer, no tanto en el sentido de financiación, porque a fin y al cabo, las aseguradoras intentan dar un buen servicio a precios convenientes, sino de que Hacienda que restaure el nivel de aportación e, incluso, lo aumente, para que no haya distinción entre los diferentes mutualistas administrativos (Muface, Isfas y Mugeju).

¿Cómo ven las aseguradoras que participan en el concierto sanitario de Muface esos posibles recortes que piden desde Bruselas?

Jaime Ortiz: También somos optimistas porque nos gusta el modelo. Sin embargo, hay problemas de financiación y de envejecimiento en este colectivo. Pero hay un aspecto que podría ayudar a mejorar esta situación y sería la incorporación de nuevos colectivos de funcionarios, como por ejemplo, los de las Administraciones locales o de comunidades autónomas. Esto ayudaría a que la edad media de estos funcionarios bajase y mejorase la situación. Muface es un modelo muy bueno porque promueve la libertad de elección entre sanidad pública y privada, pero tiene unas dificultades que nos hacen prever un escenario malo como no cambie.

"Muface tiene futuro, a pesar de la crisis".

Hay ciertos partidos políticos que hablan, incluso, de un Muface a nivel nacional y para todos. ¿Sería conveniente para este modelo ir en esta línea?

Jaime Ortiz: No sé si me atrevería a hablar de un Muface a nivel nacional, pero lo que sí propondría sería otro modelo de sanidad pública-privada. Desde Asisa, como una de las participantes en esta mutualidad, entendemos que si se aumentase el número de colectivos, mejoraría el modelo, porque sería más estable.

Juan Carlos Castro: Este modelo está siendo muy mal entendido y ha sido utilizado políticamente, en ocasiones, de manera muy torticera. La colaboración público-privada de la sanidad en Muface no lo han entendido ni los gobiernos de izquierdas ni de derechas, y los sindicatos de hoy en día, más allá de CSI-F, tampoco.

¿La crisis económica ha provocado una ‘guerra de precios’, tanto en Salud como en otro tipo de aseguramiento, en España?

Joaquín Chamorro: Desde Sanitas creemos que, tanto el crecimiento en primas como en clientes se ha estacando durante la crisis, lo que nos obliga a ser más competitivos. Pero insisto, estamos en un sector privilegiado donde la sociedad cambia, especialmente con las nuevas tecnologías. Por eso, en mi compañía creemos en la digitalización, no como un fin, sino como un medio para facilitar el acceso a la salud a nuestros asegurados.

Miguel Ángel Vázquez: Yo sí creo que hay una guerra de precios. Cuando eres un poco más imaginativo te lo han copiado a los tres días todo el sector. Y es tan evidente que, ahora mismo, las campañas comerciales de las aseguradoras dicen en televisión: “Dime cuál es tu precio que te lo mejoramos”. Este tema nos preocupa, ya que AMA lleva más de 22 años asegurando la responsabilidad civil del profesional y hemos visto que algunas compañías, sobre todo las extranjeras, han entrado al mercado español, han tirado los precios y al final se han ido porque la realidad se ha impuesto.

¿Esta competencia tan ajustada ha repercutido en la calidad del producto que se ofrece a los clientes por parte de las aseguradoras?

Joaquín Chamorro: Tenemos que seguir siendo imaginativos y buscar soluciones para cada tipo de cliente. Desde Sanitas estamos liderando todo el desarrollo digital en el seguro de Salud con productos como Blua, a través del cual, acercamos a las personas las citas médicas vía web o el acceso a los documentos a través de la red. Facilitar estas cosas es aportar valor, y ese valor también tiene un precio.

Tomás Merina: En los últimos años, por parte de los hospitales privados se ha hecho una inversión extraordinaria y sus marcas tienen una penetración en el mercado que no han tenido nunca. De hecho, Asisa y Sanitas son dos de las compañías aseguradoras que mayor despliegue tiene en España, frente al modelo de Adeslas, Mapfre o DKV. Esto significa que el sector asegurador se concentró con anterioridad, mientras que el hospitalario lo ha hecho después. Otro aspecto a señalar es que las compañías aseguradoras tienen mucha fuerza en la cadena de valor frente a las clínicas, lo que ha provocado que fuercen a estos centros a una serie de tarifas. Esto no es bueno para la relación natural entre proveedor y cliente y, por tanto, para la calidad del servicio.

"Aportar valor en el seguro de Salud tiene un precio".

¿De qué manera se traduce esa bajada en la calidad?

Tomás Merina: No he dicho que se traduzca en bajada de calidad, sino que unas tarifas planas donde la compañía de seguros transfiere el riesgo a la clínica, puede tener un impacto en la calidad.

Jaime Ortiz: Yo no entiendo la guerra de precios así. Las compañías hemos tenido que ser más eficientes y establecer formas de trabajar y de relación con nuestros proveedores de manera distinta para dar el productos con la misma o mejor calidad. No hay que olvidar que la sanidad va mejorando y, actualmente, hay mejores diagnósticos; pero también el cliente está dispuesto a pagar una cantidad por la calidad de ese producto. Es muy fácil decir: “Deberíamos cobrar 20 euros más porque las primas son bajas”. Pues sí, naturalmente, y estaríamos todos más contentos, pero el cliente paga lo que puede porque también tiene -no nos olvidamos- su cobertura completa por la Seguridad Social. Por tanto, no ha sido una guerra de precios, sino una adaptación que han tenido que hacer las compañías aseguradoras.

¿Qué nuevas fórmulas o productos se están desarrollando?

Jaime Ortiz: El paciente en España es un privilegiado, ya que cuenta con una sanidad pública muy completa. Por eso, las aseguradoras tienen que adaptarse a aquellos clientes que quieren coberturas completas y que están dispuestos a pagar una prima. También hay otros que están dispuestos a tener un copago más alto pero una prima más baja, por lo que es necesario adaptar los productos a sus demandas. Por parte de las aseguradoras tenemos que seguir trabajando para hacer crecer al sector, a pesar de esa cobertura tan completa que tienen los pacientes por parte de la pública.

Joaquín Chamorro: Antes hablábamos de las nuevas oportunidades que nos pone la digitalización encima de la mesa pero tenemos que seguir viendo las peculiaridades de los colectivos que hay en la sociedad. Por ejemplo, en Sanitas hemos sacado hace poco un nuevo producto, Más Vital, orientado a personas de más de 60 años que, en un principio, tienen difícil acceso a las pólizas de salud. También el dirigido a los profesionales que tienen sus peculiaridades específicas o a los expatriados, que viven en el extranjero por motivos laborales. Para todos hay que darles soluciones específicas y creo que el sector lo está haciendo.

El microaseguramiento: ¿es una tendencia desarrollada en España o aún no ha despegado aquí? ¿De qué manera ha afectado este nuevo producto a las empresas? ¿Se han adaptado?

Jaime Ortiz: Por ahora no está arraigado este tipo de productos en España, lo cual no significa que no lo vaya a estar en un futuro con la demanda por parte de algún grupo de clientes, tal y como ha surgido en otros seguros. En Asisa, por ejemplo, ofrecemos seguros muy especializados y muy concretos para determinadas coberturas. Eso significa que hay mayor adaptación de la que había hace 10 años, pero en Salud, ese microaseguramiento aún no ha despegado.

"En el aseguramiento de Salud hay guerras de precios".

¿No existe demanda para ese producto?

Jaime Ortiz: No, porque la sanidad está muy relacionada con las coberturas, las consultas, los medios de diagnósticos, determinados tratamientos… Es importante poder explicarle al cliente todo lo que puede tener y lo que puede surgir relacionado para que no demos una mala información y que, cuando contrate, sepa la cobertura que está demandando.

Es atractivo poder trocear tanto y dar el producto exacto a lo que quieren, pero también es necesario decirle al cliente qué relaciones tienen estas coberturas y qué una especialidad está ligada, a veces, a otras o a futuros tratamientos.

Joaquín Chamorro: Son retos que tenemos las compañías. Está claro que el seguro igual para todos ya no sirve y es necesario hacer productos modulables a las necesidades de cada uno. Nosotros tenemos varios productos estándar que integran más o menos coberturas; pero luego tenemos otros donde el cliente puede ir sumando al seguro base, lo que llamamos complementos, en función a tus necesidades.

Tomás Merina: El seguro tiene una cosa que se llama prima y otra cosa que se llama franquicia. Tradicionalmente, el seguro dental tiene una prima baja y unas franquicias elevadas. Hay que tener en cuenta que prácticamente toda la población tiene Seguridad Social (excepto los funcionarios que pueden elegir aseguradoras privadas), por lo que entiendo que sí que hay hueco en el mercado y que, inevitablemente, lo van a ocupar entidades que den un servicio con una prima muy baja o prácticamente cero con unos precios baratos, y donde sólo estén incluidas las consultas sin entrar en determinados tratamientos.

Creo que por ahí sí puede ir una fórmula del futuro, pero también puede ser que no sea así y lo que ocurra es que se ensanche el mercado y en lugar de estar hablando de un 20 o 25 por ciento de personas que tienen acceso a la medicina privada, haya 5 millones más, con una llave más reducida pero con igual acceso.

Jaime Ortiz: Pero eso ya no es un seguro, es un acceso.

Miguel Ángel Vázquez: En esto también es necesaria una educación y el cliente necesita un conocimiento porque no es exactamente una cosa que la otra.

Conclusiones

Conclusiones del debate sobre el futuro del aseguramiento.

Juan Carlos Castro: Muface corre peligro, especialmente con la financiación, pero tiene futuro y espero que perdure en el tiempo. También pido que se le dé un cierto grado de autonomía a las mutualidades (incluyendo a Isfas y Mugeju) para que no existan diferencias en el acceso a los tratamientos, por ejemplo, en los oncológicos. También estamos detrás de conseguir, y en cada reunión del Consejo General de Muface insistimos en ello, la implantación de las recetas electrónicas, algo que implica una importante inversión pero que supone un ahorro a medio largo plazo.

Por otra parte, creemos que hay que unificar los precios que las distintas administraciones negocian con las compañías para que haya una cierta uniformidad. Además de esto, hay un problema serio referido a la asistencia rural a los funcionarios, donde exigimos a la Administración que nos solucione este problema, ya que en muchos casos ni siquiera existe asistencia.

Por último, desde CSI-F nos gustaría destacar el papel que tienen las compañías aseguradoras en el concierto de Muface y pedirles que no establezcan diferencias respecto al servicio que ofrecen en la privada, porque eso produce un malestar en el funcionario y aumenta el número de quejas.

Miguel Ángel Vázquez: El futuro del aseguramiento en España pasa porque siga habiendo profesionales sanitarios, y más en una mutua como la nuestra que asumimos su defensa e intentamos cada año, o bien crear nuevos productos o incrementar los que ya hay, contando siempre con las nuevas tecnologías.

En nuestro caso, estamos incorporando una garantía muy novedosa en materia de Responsabilidad Civil Profesional que es la defensa de la vida digital, un producto que borra la información del médico en Internet que no es adecuada. La ventaja que tiene AMA es que la mayoría de sus mutualistas son profesionales sanitarios y son precisamente ellos los que nos vienen demandando constantemente las necesidades que van teniendo, lo que nos hace estar puestos constantemente al día.

Jaime Ortiz: Yo soy optimista y creo que el sector del aseguramiento en Salud va estabilizándose. No es que haya decrecido nunca porque siempre creció, pero está mejorando y no sé si llegará a las cifras que teníamos en el año 2005 o 2006 que estaban en el 10 o el 12 por ciento. En Asisa buscamos conocer muy bien al cliente para orientar nuestros productos y servicios. Hay un futuro y ese futuro pasa porque nos adaptemos a esos nuevos clientes que cada vez más exponen sus datos en Internet, lo que nos permite tener una facilidad en el acceso y en el conocimiento de ellos para adaptarlos mejor a nuestros productos.

Por otro lado, es importante, como decía Juan Carlos, que la financiación se adapte a las coberturas que tenemos para mantener el modelo de mutualismo administrativo. A nuestra compañía este sistema le gusta, pero es cierto que se debe mejorar y adaptar su financiación, porque no debemos olvidarnos que prácticamente el 85 por ciento de los funcionarios siguen eligiendo sanidad privada.

Joaquín Chamorro: Desde Sanitas vemos el futuro con esperanza. Creemos que la sociedad está cambiando y que dentro del mundo asegurador tenemos grandes oportunidades de seguir empujando y adaptarnos. Consideramos que el proceso de digitación está en aumento y los nuevos clientes nos demandan nuevas soluciones. Mi compañía está inmersa en este desarrollo digital que, actualmente, supone el 40 por ciento de nuestro negocio en los próximos 4 años. En Sanitas tenemos clara nuestra misión que es hacer la vida de nuestros asegurados, vidas más largas, sanas y felices.

Tomás Merina: La frecuentación o el uso de la sanidad dependen de la riqueza de las personas y de su edad. Es decir, las sociedades más ricas y de edad media mayor usan más la sanidad y ese parece que es el camino que lleva España. Desde ASPE entendemos que la privada es mucho más eficiente, que consigue más rendimiento por unidad económica que la pública y que, por tanto, el futuro de este sector solo puede ser bueno.

Primera parte del debate sobre el futuro del aseguramiento.

Segunda parte del debate sobre el futuro del aseguramiento.


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