David García. Madrid
Con el final de la legislatura llega la hora de hacer balances. El Gobierno ha hecho el suyo en materia de Atención Primaria según se desprende de una respuesta por escrito (de las últimas publicadas en el Congreso de los Diputados antes de las elecciones) a pregunta del PSOE.
En este sentido, el Ejecutivo de Rajoy señala que el impacto de las medidas aplicadas en este nivel asistencial durante la legislatura “se puede concretar en la reducción de hasta el 20 por ciento en consultas administrativas de Atención Primaria, un ahorro en papel receta y un ahorro en envases”.
“Puede ser cierto”, dice Vicente Matas, vocal nacional de Atención Primaria Urbana de la Organización Médica Colegial, que cree que puede deberse a que “en muchos servicios de salud se está imponiendo ya la receta electrónica y sí evita algunas consultas administrativas”, apuntando además que “de hecho han disminuido las consultas de los datos de 2013 a los de 2014”.
Vicente Matas.
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En su respuesta por escrito, el Gobierno menciona a modo de balance también cuatro medidas que ha puesto en marcha sobre este nivel asistencial y que han sido las causantes de esta reducción en el número de consultas: disponer de un sistema de identificación única de las personas protegidas por el SNS mediante la base de datos común de tarjeta sanitaria individual; establecer servicios de acceso de los profesionales a la historia clínica digital del paciente desde cualquier punto del sistema; ofrecer a los ciudadanos el acceso a su historia clínica digital a través del DNI electrónico; e implantar la receta electrónica interoperable.
“Es una cosa que está bien, es positivo”, apunta Vicente Matas valorando estas medidas, y augura un descenso mayor en el futuro “en cuanto se vaya extendiendo más la receta electrónica”.
El futuro
En su respuesta por escrito, el Gobierno reconoce que “la AP ha de disponer de una alta capacidad de resolución, ya que desde ella se deben resolver el 85 por ciento de los problemas de salud de la población”.
De cara al futuro de la AP, el Gobierno habla de “retos” y en este sentido señala “su coordinación con la asistencia especializada y los servicios sociales para favorecer la continuidad asistencial y mejorar la atención prestada a los pacientes crónicos, para lo cual la telemedicina y la receta electrónica son instrumentos esenciales”.
Aunque estos “retos” son importantes, puntualiza Vicente Matas, “lo que necesita la AP es más presupuesto y más plantilla, sobre todo de médicos porque hay muchísimos centros, sobre todo los urbanos, que están saturados”.
Desde la OMC, Matas recomienda que si el Gobierno quiere que la AP funcione y lo haga adecuadamente, “lo que tiene que hacer es un presupuesto suficiente que ahora mismo no lo hay”.
Matas lamenta que en la respuesta parlamentaria del Gobierno no se haga mención ni a la financiación de este nivel asistencial ni a las plantillas. “Tiene que aumentar las plantillas de médicos que están muy escasas porque las tasas de reposición que han aplicado durante la crisis han perjudicado mucho y sobre todo en AP donde las plantillas eran escasas”, resume el vocal nacional de AP Urbana de la OMC.
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